Dos de los términos más comunes en el mundo del deporte son ‘ejercicio aeróbico’ y ‘ejercicio anaeróbico’. A continuación se describen las características de cada uno, sus diferencias y sus beneficios:
Diferencias entre ambos tipos de ejercicio
Antes de describir cada tipo es importante recordar que ambos intervienen en todos los ejercicios, generalmente una actividad física empieza como un ejercicio aeróbico para transformarse en anaeróbico, pero uno predomina por encima del otro siempre. Sin duda los ejercicios aeróbicos y anaeróbicos son importante para tener una buena forma en tu cuerpo.
La diferencia principal entre ellos es cómo se obtiene la energía para realizarlo, así mientras en el ejercicio aeróbico es imprescindible la ingesta de oxígeno, en el anaeróbico no.
Otra de las diferencias a tener en cuenta es la intensidad, así mientras en los ejercicios aeróbicos la intensidad es media o baja, siempre por debajo del umbral máximo, en los anaeróbicos, por el contrario, la intensidad es alta. La mejor forma de medir esta intensidad es a través de las pulsaciones. Para ello hay que restarle a la máxima cifra que aguantaría un corazón sano, es decir 220 pulsaciones por minuto, la edad del deportista en años. Así, se consideraría un ejercicio aeróbico suave si se realiza en el rango del 55-60% del resultado de la resta anterior, ejercicio aeróbico moderado entre el 60-75% y aeróbico fuerte todo aquel realizado a 75-85%. Una vez superada esta cifra el ejercicio se transformaría de inmediato en anaeróbico. Los ejercicios aeróbicos y anaeróbicos son imprescindibles para el manejo del oxígeno y el organismo.
El tiempo es la última de las grandes diferencias, mientras que los ejercicios aeróbicos tienden a ser de larga duración, los anaeróbicos no.
En función de estas características, se entiende por qué los ejercicios aeróbicos están recomendados para quemar grasa y los anaeróbicos para tonificar el cuerpo.
Qué deportes pertenecen a cada tipo. Recuerda que para practicar estos ejercicios aeróbicos y anaeróbicos existen diferentes deportes.
Dentro de los ejercicios aeróbicos descritos anteriormente se encuentran entre otros:
Natación.
Aeróbic o deportes similares.
Spinning.
Running.
Caminar.
Jugar al tenis o al paddle.
Por el contrario, se consideran ejercicios anaeróbicos:
Hacer pesas.
Hacer abdominales.
Carreras cortas de gran velocidad.
Pilates.
Beneficios de los ejercicios aeróbicos
Entre los beneficios que proporciona practicar ejercicios de tipo aeróbico, es decir, largos y de baja intensidad, destacan:
Fortaleza el corazón al aumentar sus latidos.
Ayuda a perder peso y a que disminuya la grasa corporal.
Disminuye la presión sanguínea.
Ayuda a reducir el colesterol malo, por lo que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Disminuye la tensión y el estrés provocando una sensación de bienestar en el deportista.
Aumenta la fuerza física y la autoestima.
Acelera el proceso de metabolización de grasas.
Contribuye a eliminar toxinas.
Disminuye el riesgo de artritis, osteoporosis y diabetes.
Beneficios de los ejercicios anaeróbicos
En cuanto a los ejercicios anaeróbicos, está comprobado que benefician al organismo del siguiente modo:
Aumentando el ánimo y mejorando el sueño.
Reduciendo la flacidez y la obesidad.
Disminuyendo el riesgo de sufrir fracturas y osteoporosis.
Fuentes: runners.es, todonatacion.com y elmundo.es
Imágenes (por orden de aparición): lululemon athletica/Flickr, lululemon athletica/Flickr, juanpol/Flickr, StuSeeger/Flickr y sazztastical/Flickr.