Dormir no está de moda
Cada día son más las personas que aprovechan la noche para disfrutar de su tiempo de ocio. En el centro de las ciudades se ven personas divirtiéndose cualquier día de la semana hasta altas horas de la noche. Todo el mundo tiene compromisos de cenas o espectáculos muy a menudo. Le estamos robando tiempo a nuestro descanso y esto debería ser intocable.
Las largas y agotadoras jornadas de trabajo a las que nos hemos habituado nos dejan sin tiempo libre. Por este motivo, en muchos casos, la única manera de sentir que tenemos un poco de ocio es ocupar las horas nocturnas para divertirnos. Algunas personas solo se permiten dormir las horas necesarias los fines de semana. Sin embargo, esto mantenido en el tiempo es muy perjudicial para nuestra salud. Cuando no descansamos lo necesario nuestro organismo se va debilitando poco a poco hasta que llega a enfermar.
Necesitamos dormir bien y las horas que cada persona necesite, cada noche. Cuando dormimos, además del descanso físico y psicológico, nuestro organismo realiza funciones de limpieza y reparación que son muy importantes. Si no descansamos lo suficiente, nuestro cuerpo no podrá llevar a cabo estas funciones.
Por qué necesitamos dormir
Seguramente que nunca te has preguntado por qué necesitamos dormir. Ciertamente no se conoce exactamente el motivo aunque existen numerosas teorías.
Algunas de esas teorías nos dicen que al dormir procesamos y consolidamos nuevos recuerdos. Otras nos sugieren que los sueños sirven para hacer una especie de ensayo de situaciones y experiencias que en la vida normal podrían ser problemáticas. Según las investigaciones de Matthew Walker de la Universidad de Berkeley lo más importante del sueño son los sueños. Parece ser que, aunque no lo recordemos, cuando estamos dormidos siempre soñamos. Según M. Walker, estos sueños son muy importantes para hacer frente a acontecimientos desagradables.
Dormir ocho horas seguidas
Siempre se nos ha dicho que lo ideal es dormir ocho horas seguidas cada noche. Sin embargo, esta idea es bastante moderna. Anteriormente a la existencia de la luz artificial lo normal era hablar de sueño bifásico, es decir, que el sueño se dividía en dos segmentos separados por otro de vigilia. Hoy en día, sigue habiendo diferentes opiniones en cuanto a la cantidad de horas que deberíamos dormir.
El ser humano en su obsesión por obtener el control de todo, se empeña en regular el sueño. Lo que hemos olvidado es que no todo el mundo necesita dormir la misma cantidad de horas. De hecho, estos patrones de sueño van variando con el paso de los años.
La Fundación Nacional del Sueño (NSF) en Estados Unidos, ha publicado hace poco nuevas recomendaciones acerca de la cantidad de horas que debemos dormir según nuestra edad, basándose en recientes investigaciones. Están serían esas recomendaciones: Recién nacidos (entre 0 y 3 meses) Recomendado: de 14 a 17 horas./ Aceptable: de 11 a 19 horas.
Bebés (de 4 a 11 meses) Recomendado: de 12 a 15 horas./ Aceptable: de 10 a 18 horas.
Niños pequeños (de 1 a 2 años) Recomendado. de 11 a 14 horas./ Aceptable: de 9 a 16 horas.
Niños preescolar (de 3 a 5 años) Recomendado: de 10 a 13 horas./ Aceptable: de 8 a 14 horas.
Niños edad escolar (de 6 a 13 años) Recomendado: de 9 a 11 horas./ Aceptable: de 7 a 12 horas.
Adolescentes (de 14 a 17 años) Recomendado: de 8 a 10 horas./ Aceptable: de 7 a 11 horas.
Jóvenes (de 18 a 25 años) Recomendado: de 7 a 9 horas./ Aceptable: de 6 a 11 horas.
Adultos (de 26 a 64 años) Recomendado de 7 a 9 horas./ Aceptable: de 6 a 10 horas.
Ancianos (más de 65 años) Recomendado: de 7 a 8 horas./ Aceptable: de 5 a 9 horas. Estas pautas son, sobre todo, orientativas. Cuando más años cumplimos menos horas de sueño necesitamos. Aún así, no es recomendable dormir menos de seis horas. La NSF establece un número de horas de sueño recomendadas, otra franja aceptable, y aconseja que fuera de esas franjas no sería saludable situarse.
No obstante, cada persona es un mundo. Lo verdaderamente importante es cómo nos sentimos de descansados después de dormir. Si una persona se siente feliz y con ganas de trabajar con siete horas de sueño es perfecto. Probablemente otras necesitarán dormir nueve horas para sentirse de la misma manera.
Algunas recomendaciones para dormir bien
Ya hemos visto qué cantidad de horas debemos de dormir según nuestra edad para encontrarnos bien por la mañana. Pero además de la cantidad de horas, es muy importante que estas horas sean de calidad. Para que nuestro sueño sea de calidad deberíamos observar ciertas pautas:
No tomes bebidas excitantes por la tarde: A partir de las 6 de la tarde no deberías tomar ningún tipo de bebida que contenga cafeína o teína.
Cena bien y temprano: Procura cenar aproximadamente dos horas antes de ir a la cama. La cena tiene que ser nutritiva pero no demasiado pesada, ni tampoco demasiado ligera. Los alimentos ricos en triptófano, como el plátano, la piña, el aguacate o la ciruela, por ejemplo, favorecen el sueño, procura incluirlos en tu cena.
Medita antes de dormir: Una pequeña meditación o relajación antes de dormir hará que nuestro sueño sea mucho más reparador y tranquilo. No es bueno sumergirse en el sueño cargando con todas las tensiones del día que ha terminado.
Habitación bien ventilada: Acostúmbrate a ventilar 3 o 4 minutos la habitación donde vas a dormir justo antes de acostarte. Este hábito tan sencillo también te ayudará a dormir mejor.
No te abrigues demasiado: A veces nos abrigamos demasiado para dormir y esto dificulta el sueño. Procura que tanto la ropa de cama como la ropa que utilices para dormir sea de fibras naturales. Sea cual sea tu edad, ten en cuenta que el hecho de dormir bien es básico para gozar de buena salud. La cantidad de horas la determinará tu cuerpo, si tú se lo permites. Recuerda que cuando hemos dormido lo suficiente lo notamos porque comenzamos el día con mucha más energía y alegría.
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Fuente: este post proviene de Crear Salud, donde puedes consultar el contenido original.
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