La Navidad es un periodo del año marcado por los excesos en todos los sentidos. Los excesos emocionales son evidentes ante la intensidad de tantos reencuentros personales que rompen con la tónica habitual del resto del año con una esencia más individualista en muchos casos. A su vez, los excesos de alimentación y sedentarismo también son habituales en estas fechas. ¿Cómo puedes hacer que este año sea distinto? En Fisiostar te lo contamos.
1. Planificación para la Navidad
En lugar de vivir la Navidad al compás de la improvisación del momento, intenta que este año sea distinto. Identifica cuáles han sido tus fortalezas, tus debilidades, tus oportunidades y tus amenazas en términos de hábitos saludables en pasadas navidades. De este modo, puedes mantener algunos puntos y corregir otros. Esta planificación tiene que ver con la mentalidad y la disposición de ánimo con la que quieres vivir estas fiestas.
2. No des vacaciones al ejercicio físico
Es cierto que muchas rutinas cambian en fin de año, sin embargo, es fundamental que este año no conviertas la Navidad en una excusa para saltarte de golpe todas tus buenas costumbres. Entre otros motivos porque cuando dejas de entrenar un hábito, luego tienes que retomarlo desde cero. Con todo el esfuerzo que ello supone.
Tal vez no puedas o no te apetezca ir al gimnasio en Navidad, sin embargo, en esta estación puedes disfrutar de largos paseos con el aliciente añadido de disfrutar de la decoración típica de estas fiestas de fin de año. Por tanto, programa distintas rutinas de paseo en las calles.
3. Normaliza los menús
Es cierto que la Nochebuena o la Nochevieja están condicionadas por los excesos, sin embargo, esta no debe ser la norma universal en todo momento. La Navidad tiene muchos días. Sigue con tu dieta de siempre en otras fechas del calendario. Por tanto, haz la cesta de la compra no tanto pensando en que es Navidad, sino en que quieres cuidarte y mimarte. Para ello, recuerda añadir una buena cantidad de fruta fresca y verdura del invierno para elaborar deliciosos platos.
4. Celebra la Navidad con otros planes no gastronómicos
¿Por qué todos los momentos navideños deben girar en torno a la comida? Esta es la principal trampa para el aumento de peso en estas fiestas. Es recomendable que intentes desarrollar otras ideas. Por ejemplo, celebra estas fiestas compartiendo experiencias. Tal vez puedas ir con tus amigos a algún espectáculo de teatro.
5. Come despacio y disfruta de los alimentos
Los excesos también vienen acompañados por esa prisa que te lleva a comer sin apreciar realmente los alimentos que estás tomando en la mesa. Intenta masticar los alimentos con calma y saborear su textura, es decir, siente como los alimentos estimulan tus sentidos. De este modo, aprecias mejor el sabor que estás tomando. Establece un orden de prioridades en la mesa. No se trata de probar todos los platos del largo menú de Nochebuena. De este modo, luego no inicias el mes de enero pensando en perder peso sino centrado en otros objetivos.