Olvídate de dietas y dedícate a disfrutar, es la mejor manera de llegar a donde realmente quieres

¿Y por qué ibas a hacer eso?¿Por qué ibas a hacerme caso? Igual pasa por tu cabeza esas frases algo antinaturales de para estar guapa hay que sufrir, o tengo que ponerme a dieta ya.

Como formadora para consolidar hábitos saludables y  motivación, te diré que enfocarte en  cosas que te hacen sufrir para estar o creer que estás guapa es  ilógico y contraproducente. Algo que me gusta de este mundo es que hay un abanico de posibilidades ilimitadas para cada uno de nosotros (aunque a veces no nos damos cuenta porque vamos con el piloto automático).  Cuando queremos consolidar un hábito en nuestra vida, una nueva actividad que nos queremos ver realizando con constancia,  hay que tener en cuenta elegir algo que nos guste, que nos sea agradable, que nos haga disfrutar.

Entonces cuando encontramos esa actividad que nos ensalza, esa manera de comer sana y placentera, ese lugar en que me doy espacio para escucharme,… entonces nos es más fácil vencer la pereza y otros obstáculos que a veces surgen,  y empujados por ese agradable “flow” que has generado, moverte hacia allí. “Flow” porque es fluido, porque no te dedicas a cansarte inútilmente nadando contra corriente.



Céntrate en los beneficios

Totalmente poderoso: haz una lista de los beneficios que obtienes al realizar esa actividad, por ejemplo si se trata de apuntarme a clases de danza africana, que es algo que a mi me encanta, mis beneficios son:

Me pongo alegre: genero endorfinas y buen rollo

Muevo todo el cuerpo, me pongo en forma disfrutando

Mejoro mi salud física, emocional y mental

Me ayuda a mantenerme en un peso sano

Es un regalo para mí, un tiempo que me concedo

Libero tensiones

Estoy consciente, mindful, ya que pongo la atención en mi cuerpo, en la respiración, en el momento presente. Y al estar en el Presente, ese regalo del cual a veces nos olvidamos, se desvanece la ansiedad de estar enfocada en el futuro con planes o preocupaciones


Las dietas temporales no funcionan

Seguramente si estás leyendo esto ya lo has experimentado en tus carnes. Te voy a recordar porque las dietas no funcionan:

Si consigues seguirlas solo te ofrecen resultados temporales ya que luego vuelves a tus antiguas conductas y a tu antiguo peso + algún kilo de más por haberte dedicado a destirotar tu metabolismo

Las restricciones a que nos someten no pueden llevar a padecer ansía por comer y otros trastornos alimenticios

Suelen ser difíciles de seguir

Generan frustración y falta de confianza. Como no te dan los resultados esperados, y vuelves a tu peso de antes de la dieta

Nos condenan a un círculo vicioso que nos hace sentir culpabilidad, vergüenza, sufrimiento e impotencia.

La solución:

Enfócate en realizar comidas y actividades saludables y placenteras

Olvídate de dietas y realiza un proceso para consolidar hábitos saludables

Escúchate, cuando vamos potenciando nuestra autoescucha, se nos abre una vía mágica para saber que es lo mejor para nosotros. El que sabe escuchar obtiene respuestas

Disfruta, centrate en los beneficios

Cuídate, disfrútalo : tu cuerpo es el lugar maravilloso que tienes para Vivir, y ese, ese si que es temporal
¿Cómo podrías  hacer tus comidas más saludables, placenteras y ajustadas a tu ritmo de vida?

¿Qué tipo de actividad física te hace sentir bien?

¿Cuáles son las cosas en tu vida de las que te sientes agradecido?

Fuente: este post proviene de Mentxu da Vinci, donde puedes consultar el contenido original.
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