Hola a todos, con el buen tiempo llega el destape y raro es el día que no se acerca alguien a la Farmacia, pidiendo algo para perder el peso que se ha acumulado durante todo el invierno.
Todos están en búsqueda de algún producto milagro o una dieta express, ¡que en un pis pas nos quite los malditos “michelines”! Y lo más gracioso del tema, es que todos YA sabemos cómo hacerlo si comemos de forma razonable y con una dieta saludable, practicando más ejercicio, ¿alguno se piensa que no perderá peso?
Pero hoy sólo voy a hablar de los niveles de glucosa en sangre, que están también muy relacionados con la pérdida de peso y los que muy pocos la tienen en cuenta. Voy a tratar de explicar la relación entre la pérdida de peso y los picos de glucosa.
Cuando comemos, los niveles de glucosa en sangre aumentan (por los alimentos que ingerimos) y esto hace que el páncreas comience a producir insulina. Gracias a la insulina que sirve de una especie de “llave” para abrir las células a la glucosa que entra dentro de ellas. Todo esto sirve para que las células produzcan energía y ¡esto está muy bien! pero también gracias a la insulina almacenamos los excesos de glucosa en forma de grasa en el tejido adiposo (¡así se comienzan a formar los dichosos michelines, la celulitis, la piel de naranja!)
Y por tanto cuando comemos en exceso, la insulina transforma el exceso de glucosa en grasa y esta grasa es guardada por nuestro querido organismo tan sabio. Y la guarda, ¡por si algún día se acaba “su comida” (o sea la glucosa)! Es cuando nuestro cuerpo tirará de estos almacenes de comida (esto sucede cuando nos ponemos a dieta, metemos menos comida en el cuerpo y este tiene que tirar de sus almacenes).
¡Pero ahora viene lo mejor y lo más interesante! Se ha visto que cuando comemos 3 veces al día, hay un aumento brusco de glucosa, lo que provoca una subida brusca de insulina.
Para disminuir esos niveles de glucosa en sangre, el problema llega cuando se da la bajada brusca de la glucosa. Y cuanto más brusca es la bajada, más rápido aparecerá la sensación de hambre y más posibilidades tendremos de “salirnos de la dieta”.
Por tanto, para perder peso debemos de comer 5 veces al día, ¡¡pero poquito¡¡, con esto conseguirás este aumento gradual de glucosa, para que la insulina liberada sea también gradual. Entonces nuestro cuerpo tirará de las reservas de grasa almacenada y podremos empezar a perder peso. Y también como no se producirán bajadas bruscas de glucosa, no tendremos esa sensación de hambre.
¡¡Pero siempre recuerda es mejor comer 5 veces al día, pero POQUITO!! Y no olvides de ayudarte con plantas como el té verde, la alcachofa, la garcinia cambodgia, el café verde, la espirulina. Bueno el próximo día os cuento que otras planta pueden ayudarnos a controlar peso!
¡Piensa en verde!
Referencias:
https://kidshealth.org/es/teens/metabolic-syndrome-esp.html
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