Cuando la meta es bajar de peso, definir el cuerpo y ganar masa muscular, todos acuden al gimnasio, aunque el inicio puede ser un tanto complejo. Muchos principiantes suelen tener inconvenientes o ciertas fallas, así que se rinden y abandonan sus propósitos poco tiempo después.
Sin embargo, para sobrevivir los primeros días y lograr las metas propuestas, permaneciendo en el gimnasio, existen algunas recomendaciones a seguir muy útiles. Con estos tips, es muy probable que cualquier novato resulte exitoso entre las máquinas.
Consejos para comenzar el entrenamiento en el gimnasio
En primer lugar, se debe hacer un compromiso, una vez se haya decidido iniciar en el gimnasio, no puede valer ninguna excusa para no asistir, no importa si hay cansancio, es necesario ir 2 o 3 veces por semana.
Se deben definir los propósitos y el cuerpo que se desea lograr, pues en función de esto se crean las rutinas de entrenamiento. Dichos objetivos deben ser realistas y de acuerdo a la condición física.
Mantener una actitud mental positiva, tener disciplina y persistencia.
No hay que asustarse o intimidarse por la diversidad de aparatos que se pueden encontrar en un gimnasio.
Si se desconoce alguna máquina, pedir instrucciones, en los gimnasios suele haber un instructor, quien también brinda ayuda para establecer las rutinas.
Antes de comenzar el entrenamiento, no olvidar los ejercicios de calentamiento y estiramiento, estos son fundamentales y de ellos depende gran parte del éxito de todo el trabajo.
No se debe abusar de los ejercicios, comenzar con uno o dos básicos para cada zona, luego se agregan más de forma progresiva. Asimismo, rotar y hacer ejercicios que trabajen todas las zonas del cuerpo.
Si en algún momento se siente que se está haciendo mucho esfuerzo, disminuir el peso o la carga.
Es importante ser paciente, el tiempo correcto para juzgar los progresos es luego de 3 meses, llegar al cuerpo deseado lleva tiempo.
Seguir una alimentación adecuada y respetar los momentos de descanso, el entrenamiento es solo la mitad de todo el trabajo.
Llevar los implementos necesarios como ropa cómoda, lo mejor es que sea elástica, también se recomienda de algodón, ya que este textil absorbe mejor la transpiración. El calzado debe ser confortable, con una buena suela y soporte que le dé suficiente apoyo al tobillo, usar guantes para levantar el peso y evitar lesiones, también tener una toalla para secar el sudor.
Tener siempre una botella con agua, la hidratación es de suma importancia, antes, durante y después del entrenamiento.
Tener a la mano un mp3 siempre es útil, escuchar música durante el entreno resulta motivador y permite concentrarse mejor.
Se puede llevar un diario para registrar las series, las repeticiones y los pesos, esto es de mucha ayuda cuando se quiera medir el progreso.
Los días que no se asista al gimnasio, hacer otras actividades como caminatas, también subir escaleras, por ejemplo en el trabajo usarlas en lugar del ascensor.