Vamos hablar en este artículo cuales son las causas, síntomas algunos tratamientos naturales que puedes hacer en casa y un par de ejercicios sencillo para aliviar el dolor corporal.
Causas del dolor en todo el cuerpo
Una de las causas que más se menciona cuando se te presenta este tipo de malestar es:
La fibromialgia: es una enfermedad que hasta hace poco fue reconocida por la Organización Mundial de la Salud. Se trata de una extraña enfermedad que provoca dolor en todo el cuerpo, a causa de trastornos relacionados con un desequilibrio en los mecanismos que nos permiten regular los dolores de todo el cuerpo.
Una gripe: a veces un malestar gripal no se manifiesta solo con congestión nasal y ojos llorosos. Un malestar agudo en músculos y articulaciones puede ser la señal que nos indica que un mal de gripe se avecina, ante lo cual debemos prepararnos con tener a la mano antigripales, altas dosis de vitamina C y reposo casi total.
Exceso de ejercicio: Cuando el cuerpo se somete a altas frecuencias de estrés muscular, puede resentirse uno o dos días después, con dolores en los músculos y en las articulaciones principales, que pueden durar dos o tres días.
Estrés: Si estás bajo mucha presión laboral o académica puedes sentir que tu cuerpo no está respondiendo al ritmo de las actividades que realizas.
Síntomas del dolor de cuerpo
No se trata solo de sentir que nos han dado mazazos sino de dolencias determinadas que agudizan o nos hacen sentir que el mundo se viene abajo, como:
Dolor abdominal.
Rigidez corporal.
Dolor de espalda.
Dolores en las articulaciones grandes (brazos y piernas) y pequeñas (dedos).
Migraña.
Fiebre leve.
Sensación de hormigueo en manos y pies.
Problemas de sueño o para dormir.
Poca concentración.
Imposibilidad de caminar o de hacer actividad física.
Imposibilidad de hacer las labores del hogar.
Hipersensibilidad a factores externos, como al agua o al calor.
Como se ve, este problema puede ser más molesto de lo que normalmente oímos decir en boca de terceros.
Tratamiento para el dolor en el cuerpo
Alguno remedios naturales son efectivos para quitar el dolo entre ellos tenemos:
Baños de agua caliente: Una estrategia es hacer uso de aceites aromáticos para que sea una experiencia relajante y te dé la libertad ante el dolor.
Bebidas calientes: Hablamos de infusiones con base en plantas como la manzanilla, el jengibre, el tilo, la hierbabuena y la menta. Unas tazas al día, al menos cada tres horas, te ayudará a salir del cuadro de dolencias de manera rápida y sabrosa.
Descansa: una buena sesión de sueño puede ser la vía de escape a este mal momento que estás pasando. Trata de dormir bajo buen abrigo, y después de haber bebido una taza de té. Evita el desgaste corporal y toma las cosas con calma que en la relajación encontrarás el alivio.
Cuida lo que comes y bebes: cuando tu cuerpo se resiente, debes mantener siempre una buena hidratación, así como elevar el consumo de frutas frescas. Serán una excelente opción para merendar y dar vitaminas a tu organismo para combatir las dolencias.
Ejercicios para calmar dolor de cuerpo
Aunque en la sección anterior recomendamos el descanso, una breve dosis de actividad física te puede ayudar a acelerar la recuperación corporal. Cuando permaneces mucho tiempo acostado o en descanso, el cuerpo puede acostumbrarse más de lo debido a esta situación y no parece verse obligado a salir de la crisis.
Salir a caminar: no se trata de que camines a paso de atleta de caminata. Una breve caminata de unos 15 minutos te puede ser de ayuda, preferiblemente a media mañana, para que recibas los rayos solares leves.
Subir escaleras: si en casa hay escaleras entonces anímate a subirlas durante unos cinco o siete minutos. Repite una vez más por la tarde.
Estira tus músculos: haz como si se tratara de una sesión de yoga en casa. Estira los grandes grupos musculares, como de piernas, brazos y tronco, y luego toma el ya recomendado baño caliente.
Si sigues al pie de la letra todas estas indicaciones podrás deshacerte de este problema en menos de lo que normalmente lo harías, solo al estar sentado esperando a que la calma llegue. Está en tus manos el alivio cuando pones toda tu voluntad para recuperarte.
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