Gracias a ella soy quien soy ahora, por ella comprendí que valió la pena todo lo que he pasado en mi vida, y comprendí la responsabilidad de superarme a mi misma para poder darle bases para crecer con una sana autoestima.
¿Cómo poder ser un buen ejemplo para ella sin tener la congruencia de vivirlo en carne propia?
Al menos así lo veo ahora. Y hoy, en su cumpleaños, no tengo nada más que decir que GRACIAS.
¿Cuál es tu motor o motivación en la vida?
Namasté.