El primer paso para tener una buena autoestima es conocernos a nosotros mismos, lo que nos gusta, lo que no nos gusta, nuestras habilidades o lo que se nos facilita y las cosas que nos cuesta más trabajo, ya sea en deportes, en materias escolares o cuando se trata de entablar relaciones con las personas. La autoestima es el valor que nosotros damos a nosotros mismos a partir de conocer todo lo anterior en nuestras vidas, es resultado de nuestras experiencias, y, en palabras más simples, es el cuánto nos queremos.
Nuestra autoestima va desarrollándose junto con nosotros durante toda la vida, pasa por etapas, como nosotros, donde puede estar alta y a veces muy baja, es decir, que cuando una persona tiene su autoestima alta, se siente muy valiosa, sabe que es buena para dibujar, por ejemplo, también para escribir y para hacer amigos y se siente feliz por ello. Por otra parte, cuando una persona tiene su autoestima baja, esta persona se sentirá triste, creerá que no puede hacer nada (o muchas cosas) bien, y actuará de forma insegura.
Niños: Aquí dejo dos recomendaciones que ayudarán a fortalecer tu autoestima.
1. Recuerda 5 cosas que hiciste ayer
¿Cómo te sientes por haber hecho eso? ¿Triste? ¿Alegre? ¿Orgulloso?
2. Escribe diariamente 5 cosas que hagas de las que te sientas orgulloso, sin importar qué tan simples sean, como despertarte temprano, sacar buenas calificaciones, ayudarle a tu mamá a cocinar o limpiar, etc.
3. Lee tu lista de cosas cuando quieras para ayudarte a recordar lo valioso que eres.
Padres: Recuerden que ustedes son la clave para que sus hijos desarrollen y fortalezcan su autoestima.
Bibliografìa:
Lev,R. Gershen, K.. (1992). ¡defiéndete! una guía innovadora para que el niño adquiera poder personal y autoestima. Mèxico: Pax México.