Que sabemos de Radicales Libres y Antioxidantes
Los antioxidantes son compuestos químicos que bloquean la actividad de otros compuestos químicos conocidos como radicales libres. Los radicales libres son altamente reactivos y tienen la posibilidad de causar daños a las células, incluso daño que puede resultar en cáncer.
Los radicales libres se forman naturalmente en el cuerpo. Además, algunas toxinas ambientales pueden contener altas concentraciones de radicales libres o pueden estimular a las células del cuerpo para que produzcan más radicales libres.
El cuerpo produce naturalmente algunos antioxidantes. Otros pueden obtenerse solo de fuentes externas (exógenas), incluso de la dieta y de complementos alimenticios.
La investigación en laboratorios y en animales ha indicado que los antioxidantes exógenos pueden ayudar a prevenir el daño de radicales libres asociado con la formación del cáncer.
La investigación en humanos no ha demostrado con certeza que el tomar complementos de antioxidantes pueda ayudar a reducir el riesgo de padecer o de morir por cáncer, y algunos estudios hasta han indicado que hay un riesgo mayor de algunos cánceres.
Radicales libres y su función en la formación del cáncer.
Los radicales libres son compuestos químicos altamente reactivos que pueden dañar las células. Los radicales libres se forman naturalmente en el cuerpo y tienen una función importante en muchos procesos normales de las células. Sin embargo, en concentraciones altas, los radicales libres pueden ser peligrosos para el cuerpo y pueden dañar todos los componentes principales de las células, incluso el ADN, las proteínas y las membranas celulares. El daño a las células causado por los radicales libres, especialmente el daño al ADN, puede tener un papel en la formación del cáncer y en otros padecimientos de la salud.
Las concentraciones anormalmente altas de radicales libres en el cuerpo pueden ser causadas por la exposición a la radiación ionizante y a otras toxinas del ambiente. Cuando la radiación ionizante golpea un átomo o una molécula en una célula, se puede perder un electrón, lo que resulta en la formación de un radical libre. La producción de concentraciones anormalmente altas de radicales libres es el mecanismo por el que la radiación ionizante destruye células. Además, algunas toxinas del ambiente, como el humo de cigarrillos, algunos metales y atmósferas con alta concentración de oxígeno, pueden contener grandes cantidades de radicales libres o pueden estimular a las células del cuerpo para que produzcan más radicales libres.
Los radicales libres que contienen el elemento oxígeno son el tipo más común de radicales libres producidos en los tejidos vivos. También se llaman "especies reactivas al oxígeno", o "ROS" .
¿Qué son los antioxidantes?
Los antioxidantes son compuestos químicos que interactúan con los radicales libres y los neutralizan, lo que les impide causar daño. Los antioxidantes se conocen también como "carroñeros de radicales libres".
El cuerpo produce algunos de los antioxidantes que usa para neutralizar los radicales libres. Estos antioxidantes se llaman antioxidantes endógenos. No obstante, el cuerpo depende de fuentes externas (exógenas), la dieta principalmente, para obtener el resto de los antioxidantes que necesita. Estos antioxidantes exógenos se llaman comúnmente antioxidantes alimenticios. Las frutas, las verduras y los cereales son fuentes ricas de antioxidantes alimenticios. Algunos antioxidantes alimenticios se encuentran disponibles también como complementos alimenticios.
Ejemplos de antioxidantes alimenticios son el betacaroteno, el licopeno y las vitaminas A, C y E (alfatocoferol). Se piensa con frecuencia que el elemento mineral selenio es un antioxidante alimenticio, pero los efectos antioxidantes del selenio se deben con más probabilidad a la actividad antioxidante de las proteínas en las que el selenio es un compuesto esencial (es decir, proteínas que contienen selenio) y no del selenio mismo.
La falta de evidencia científica actual no significa que los antioxidantes no deban estar presentes en nuestra alimentación. Estas sustancias se encuentran principalmente en los alimentos de origen vegetal y bien es sabido los beneficios que una alimentación rica en estos alimentos tienen sobre la salud en general. Los principales antioxidantes presentes en nuestra alimentación son:
Beta-caroteno
Presente en los alimentos de color naranja o amarillo, como las zanahorias, boniatos, melón cantalupo, albaricoques, calabaza o mangos. Pese a esta primera característica otros alimentos que también son ricos en beta-caroteno son las verduras de hoja verde, como las espinacas y coles.
Luteína
Presentes también en verduras de hoja verde como las anteriormente mencionadas.
Licopeno
Se trata de un potente antioxidante presente en los tomates, sandía, papaya o naranja sanguina. La principal fuente de licopeno de nuestra dieta es el tomate y los productos derivados de él, como salsas y ketchup.
Selenio
Se trata de un mineral que forma parte de algunos enzimas con actividad antioxidante. Las principales fuentes de selenio son el arroz y el trigo (sobre todo en su versión integral), y su contenido dependerá del selenio presente en la tierra de cultivo. No hay que olvidar que el selenio está también presente en los músculos de los animales, por lo que la carne es otra de las fuentes de este mineral en nuestra dieta.
Vitamina A
(retinol) Los alimentos ricos en esta vitamina incluyen el hígado y yema de huevo. El beta-caroteno es considerado como pro-vitamina A, ya que es precursor de esta vitamina, por lo que los alimentos ricos en beta-caroteno también pueden considerarse como importantes para contribuir al aporte de retinol.
Vitamina C
Se encuentra de forma abundante en muchas frutas y vegetales, como las naranjas, kiwis, fresas, tomates?
Vitamina E
También conocido por el nombre de alfa-tocoferol, está principalmente presente en los aceites de semillas, como girasol, soja, maíz, y frutos secos.
Existen algunos otros alimentos a los que se les ha dotado de propiedades saludables sobrenaturales debido a que presentan una elevada cantidad de fitoquímicos que podrían considerarse como antioxidantes. Sin embargo, no existe ninguna evidencia que confirme tales beneficios.
Definiciones
Instituto Nacional del Cancer