El chocolate
El primer puesto de los alimentos capaces de levantarnos el ánimo lo ocupa el chocolate, elixir de la felicidad desde hace siglos en el mundo entero. El chocolate negro contiene feniletilamina, un alcaloide y neurotransmisor que le aporta al cerebro una gran sensación de bienestar comparable a la que se siente durante las primeras etapas del enamoramiento. En el chocolate también está presente otro alcaloide, la teobromina, capaz de estimular el SNC y de mejorar el estado de ánimo al generar una sensación de bienestar y satisfacción. Pero no debemos olvidarnos de la línea: pasarse con el chocolate porque nuestro novio nos ha dejado no es la mejor idea. El alto valor calórico del chocolate puede hacernos engordar si no se consume con moderación y esto sí que afectaría a nuestro humor, pero en el sentido contrario. Unos 20-30 gramos de chocolate al día son la cantidad ideal para el cuerpo y la mente, y también para la línea.
La miel
Como todos los alimentos azucarados, la miel tiene la capacidad de estimular la producción de serotonina, el neurotransmisor encargado de provocar sensaciones de tranquilidad y relajación, y de endorfinas. Pero al contrario que otros azúcares simples (sacarosa en especial) la miel contiene muchas otras vitaminas y sustancias nutritivas que son buenas para el cuerpo y la mente: manganeso, hierro, yodo, vitaminas A, E, el complejo de las vitaminas B, y el potasio son excelentes remedios para el organismo. Juntos favorecen la absorción del magnesio, principal responsable de la sensación de buen humor que causa la miel, considerada desde siempre como un antidepresivo natural que favorece la concentración y el descanso.
La merluza
Al igual que el salmón y el pescado azul en general, la merluza es una fuente de Omega 3 y 6, los llamados ácidos grasos buenos, que no deberían faltar nunca en una dieta equilibrada. Muchos estudios han demostrado su efecto antidepresivo, siendo capaces de contrarrestar los efectos nocivos del estrés cotidiano. Consumidos crudos, los efectos de estos alimentos son mucho mayores, prestando mucha atención a su frescura ya que son fácilmente perecederos. Además, la merluza es uno de los pescados que tienen un mayor porcentaje de triptófano, aminoácido esencial, del que hemos hablado con respecto a las carnes blancas, que posee importantes propiedades antidepresivas.
Los huevos
Quizá no todo el mundo sepa que los huevos, un alimento tan habitual en la dieta española, pueden reducir el riesgo de depresión. Esto se debe a que contienen una sustancia muy importante para regular el estado de ánimo, el ácido pantoténico o vitamina B5, famoso por su capacidad de ayudar al cuerpo y a la mente en situaciones de estrés. De hecho, su carencia puede causar estados de ansiedad, tristeza, apatía y nerviosismo, directamente asociados a un estado depresivo leve. Por ello no es bueno eliminar los huevos de un régimen alimenticio equilibrado, aunque no debenmos olvidarnos del colesterol: los médicos aconsejan que no se supere la cantidad de dos huevos por semana y, preferiblemente, no en las mismas comidas.
Brécol y espinacas
El brécol y las espinacas tienen innumerables propiedades pero además son excelentes antidepresivos naturales. Estas verduras son ricas en vitamina B9, conocida como ácido fólico, una sustancia capaza de prevenir y aliviar los estados leves de ansiedad y de reducir el riesgo de depresión, incluso de la depresión postparto. Las espinacas y el brécol son los alimentos que contienen una mayor cantidad de esta sustancia y es bueno integrarlos en nuestra dieta diaria para asimilarla al máximo, procurando no cocerlos demasiado de modo que no pierdan todas las propiedades, incluida la antidepresiva.
Los cereales integrales
Los cereales integrales como la pasta, el pan y los copos de maíz, ricos en ácido fólico, pueden ser verdaderos aliados a la hora de luchar contra la depresión. Al ser azúcares de combustión lenta, hacen que el estómago esté ocupado en la digestión durante algunas horas, y al contrario que los azúcares simples, su presencia en la sangre se mantiene constante por mucho tiempo. El resultado es que la sensación de bienestar y de saciedad que aporta este tipo de alimentos nos cambia el humor y nos hace sentir satisfechos y tranquilos. El ácido fólico es el principal responsable de la síntesis de la dopamina, serotonina y noradrenalina, importantes neurotransmisores cerebrales.
Semillas de calabaza y de girasol
Las semillas de girasol y de calabaza son unos excelentes aliados para el buen humor pues son ricos en ácido fólico, importante para prevenir la depresión, y en magnesio. Esto tiene un papel muy importante a la hora de combatir el estrés, el cansancio físico y mental, el insomnio y la sensación deansiedad. Además, mejora el intercambio de oxígeno en la sangre y es una excelente ayuda para los músculos y la actividad cardíaca..