Esos días en los que la fortuna, el azar o la alineación de los astros te permite dormir ocho horas del tirón, son días en los que tu cuerpo ha tenido tiempo de reparar y reponer todo lo consumido durante el día. Que no es poco. Ir, venir, trabajar, estrés, carreras, niños, atascos, preocupaciones, la casa... todo lo que nos sucede cada día nos va consumiendo la energía. No nos damos cuenta porque vivimos a un ritmo tan alto, que no tenemos tiempo de pararnos a pensar en ello. Pero vivir consume, y vivir a la carrera, consume mucho más.
Recuerdo esas noches, afortunadamente pocas, en las que mis hijos siendo muy pequeños, me despertaban hasta 4 veces. Al día siguiente tenía un malestar que era casi insoportable. Me daba cuenta de ello porque estaba en casa sin hacer mucho. Pero cuando vuelves al trabajo y las horas de sueño se normalizan, no percibes esa necesidad de dormir del mismo modo. Los cuatro cafés que tomas durante el día y la actividad de tu cuerpo camuflan el cansancio. Pero está ahí.
Y tu cuerpo te enviará señales. Estarás más irascible, te enfadarás con más frecuencia, tendrás más despistes y tu vida en general, será poco ordenada. Entretanto, habrás hecho algún viaje, tus hijos habrán aprendido un montón de cosas nuevas y en tus ratos libres no habrás hecho nada de provecho. Porque estás cansada. Te habrás perdido muchos de los mejores momentos de tu vida, y tú sin darte cuenta.
Dormir ocho horas, dejar que tu cuerpo se recupere de la actividad diaria, es tan necesario como respirar. Márcate una hora fija todos los días para terminar toda actividad. No te acuestes directamente, porque tu mente malévola te tendrá dando vueltas a asuntos que no te dejarán dormir. Deja al menos una hora libre antes de acostarte; puedes aprovechar para leer, ver la tele o tejer, mi terapia anti estrés ;) Y recuerda, acuéstate cada noche en un pensamiento positivo en mente, te levantarás de mejor humor!
Yo voy a ver si este fin de semana recuperó las horas que me faltaron en las últimas semanas
Quién por aquí no duerme sus ocho horas?
Un abrazo!!