El verdadero problema, radica en que la mayoría de las personas que logran bajar de peso, piensan que jamás lo volverán a recuperar y empiezan a descuidar su alimentación y su actividad física por lo que al poco tiempo regresa el problema.
El verdadero trabajo para mantener un peso ideal es el mantenimiento de todo lo que conlleva seguir así. Es decir, mantener un equilibrio entre la alimentación sana y el ejercicio físico.
Posiblemente piensas en estos momentos que tendrás que estar bajo dietas toda tu vida, que al salir de fiesta solo podrás comer ensaladas, pero esto no tiene que ser siempre así, existen algunos productos que se pueden usar para ayudarnos en esta fase de mantenimiento.
Por ejemplo, te hablaré del Chistosán.
El chistosán es una fibra que no puede ser absorbida por el organismo humano y que tiene su origen en el caparazón de ciertos crustáceos como el cangrejo.
Entonces cuando tomas esta fibra llamada chistosán, al momento en que llega al intestino, captura las grasas de tú dieta impidiendo la absorción de las mismas, capturando de 5 a 10 veces el peso en grasas, de manera que esta grasa no se absorbe y sí se elimina como producto de desecho intestinal.
Si comprendiste el proceso del que hablamos, ya te habrás dado cuenta que es un producto que se recomienda para mantenimiento de tu peso ideal.
Además de lo ya mencionado vamos a darte 4 razones para tomar chistosán y perder peso.
1.- Ingerir chistosán previamente a las comidas con grasa, rebaja la cantidad de grasas que se asimilan con lo que no se incorporan al torrente sanguíneo.
2.- El chistosán captura hasta 12 gramos de grasa ingerida en la alimentación inmediata. Captura tambien los acidos biliares que se forman a partir del colesterol, por ello el colesterol total baja y la relación colesterol HDL/Colesterol total , mejora.
3.- Actúa como antioxidante protector del epitelio intestinal.
4.- Es una fibra alimentaria intestinal que no solo aumenta las evacuaciones acelerando su tránsito, también favorece el aumento de la población de Bífidus y Lactobacilos, que disminuyen el Ph del colon, inhibiendo el crecimiento de gérmenes patógenos como la salmonella, etc.
El chitosán se puede encontrar en forma de cápsulas y muchas veces se acompaña de suplementos adicionales como pueden ser, la garcinia cambogia, el té verde, o el té rojo, que por su acción quemagrasas complementan perfectamente las propiedades del chitosán.
Así que ya sabes, no es necesario estar bajo dietas una vez que has logrado estar en tu peso ideal, lo que puedes hacer es ingerir chistosán antes de los alimentos, especialmente si son abundantes en grasa y evitarás que estás se agreguen a tu organismo, de esa forma impide que subas de peso nuevamente.
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