En este artículo, pretendo concienciar a entrenadores y usuarios, tanto del deporte de élite como no, de la importancia de la técnica en general y dentro del gimnasio en particular.
¿Y qué es la técnica?
Las capacidades coordinativas generales y habilidades motrices? (Grosser, Brüggerman y Zintl, 1989)
Comencemos por el principio, ese primer día que vas al gimnasio y no sabes hacer ningún ejercicio. Esta clase de usuario, debe pedir ayuda al monitor de la instalación para aprender cómo se ejecutan los movimientos. Te mosqueas viendo que personas que aparentemente son más delgadas, que las ves menos fuertes, levantan más peso que tú y te preguntas el porqué. Es fácil de explicar, todo se debe a la técnica. En cuanto comiences el aprendizaje de la técnica de los ejercicios, verás cómo empiezas a levantar más peso y a realizar los movimientos con más soltura en un periodo relativamente breve. No te desesperes, los ejercicios de musculación suponen una progresión larga en el tiempo, pero es importante que desde el principio se aprenda bien la técnica y no se dude en preguntar cómo se hace cada cosa y como se utilizan las máquinas.
En la técnica se tiene que llevar una progresión comenzando con la familiarización y aprendizaje hasta acabar en el control y excelencia de la misma.
Dos conceptos que van ligados a la técnica son la eficacia y la eficiencia:
Eficacia: Desvinculada del coste y centrada solamente en el nivel y calidad del resultado independientemente del coste que pueda llevar en sí.
Eficiencia: En una tarea motriz es la relación entre el nivel del resultado conseguido y el coste de la actividad empleada para obtenerlo.
En el deporte de élite el aprendizaje va encaminado a la eficiencia y después de conseguirla se introducen nuevos gestos o recursos. En el gimnasio a nivel de usuario debemos conseguir en un primer momento la eficacia del movimiento, para que a la larga podamos realizar movimientos eficientes.
Para que lo entendamos, tenemos como ejemplo los deportes de lucha, donde al principio sufres un gran desgaste y haces todos los movimientos de forma que utilizas toda la fuerza. Después de un tiempo, comienzas a saber las técnicas (tanto de pie, como de suelo) y no te cansas tanto y realizando menos esfuerzo eres capaz de hacer movimientos mejor ejecutados y de gran fuerza.
No quiero decir que con realizar muy bien técnicamente un ejercicio vayamos a levantar el peso que queramos, pero va influir mucho en ello.
Los efectos del control de la técnica pueden resumirse en dos principalmente:
Mayor calidad en las repeticiones: Cada repetición es importante y poseer una buena calidad técnica va a suponer que aprovechemos mejor los ejercicios y provoquen un mayor efecto, vamos a mejorar nuestro rendimiento y le sacaremos más partido a las sesiones.
Prevención de lesiones: Cuanto mejor realicemos las repeticiones menos posibilidad tendremos de lesión, ya que una correcta ejecución dentro del rango articular adecuado, supondrá menor riesgo de llegar a límites de ruptura en músculos, tendones y articulaciones y disminuiremos las sobrecargas en zonas que no deberían verse implicadas. Sobre todo donde lo vamos a notar es en los dolores de espalda.
Otro tema del que habría que hablar es de los diferentes métodos de aprendizaje de la técnica en los gestos deportivos, como serían el remate en voleibol, la entrada a canasta en baloncesto y el golpeo en el fútbol, pero de esto hablaré en otro artículo extensamente.
Espero haberos transmitido la importancia de la ejecución correcta de los ejercicios, tenemos que concienciarnos que estos influyen directamente en nuestro rendimiento y en las posibilidades de sufrir alguna lesión.
Author information
Adrián Pastor
Graduado en Ciencias de la Actividad Física y el deporte (Universidad de Valencia). Deportista de élite de voleibol. Nacido en Castellón, actualmente viviendo en Valencia.
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