Pero, hacer ejercicio en casa no es como hacerlo en el gimnasio, hay muchísimas más distracciones y encima no tenemos la presión de estar pagando el gimnasio y haber ido hasta allí para perder el tiempo, con lo que es mucho más fácil que la vagancia y la pereza nos puedan.
Además, al no estar en una clase dirigida en la que nos pueda corregir el profesor, o, no tener ningún entrenador cerca al que poder preguntar aquellas dudas que nos surjan, hay algunos aspectos que debemos tener en cuenta si no queremos terminar lesionándonos.
Así que, en base a todo esto, he pensado que sería interesante hacer un post con algunos consejos para hacer ejercicio en casa sin dejarlo en el intento ni lesionarse en el camino y ahí van:
< Planifica con antelación cuánto tiempo vas a destinar a ello y el horario aproximado en que lo harás:
Puedes empezar por dos días a la semana, después aumentar a 3 y más tarde alternar un día sí uno no.
Lo importante es que seas realista y no te marques metas imposibles, como ya os comenté en este post, lo que más anima a continuar es ir marcándonos pequeñas metas e ir viendo como vamos logrando los objetivos. Marcarse un gran reto y ver como pasan las semanas sin ver los resultados que queremos es de lo más frustrante.
Tu conoces mejor que nadie tu agenda, así que planifica tus sesiones de ejercicio teniéndola en cuenta y no llevándola al límite.
Y, en lo referente a la duración, si hace mucho tiempo que no practicas ningún tipo de ejercicio físico siempre puedes empezar con 30 minutos, por poco que te parezca es muchísimo mejor que nada y, cuando tu cuerpo se vaya acostumbrando, podrás subir a 60 minutos, 90 o los que te apetezca hacer.
< Habilita un espacio para ello y asegúrate de tener el material necesario:
No hace falta que te montes un gimnasio en casa, pero asegúrate de tener un rincón despejado en el que quepas tumbada verticalmente y horizontalmente y sin que tus piernas se estén chocando constantemente con el televisor, el sofá y demás muebles.
En cuanto al material dependerá un poco de lo que desees hacer, aunque, en mi opinión, siempre viene bien tener una esterilla de yoga en casa; una vez enrolladas ocupan muy poco espacio, mantenerlas limpias no es para nada complicado y te ahorrarán más de un moretón en las rodillas y golpes en la espalda.
Pero, por ejemplo, si quieres hacer pesas no te pongas un día a lo loco a levantar las pesas de tu chico, pásate antes por alguna tienda de artículos de deporte y cógete las más ligeras, nada de yo puedo con más, empieza con poco peso que siempre estarás a tiempo de subir.
< Nunca de los nuncas te saltes los estiramientos y no tengas miedo de estirar demás, nunca es demasiado:
Como en el running, son una parte fundamental para prevenir lesiones y te ayudarán a sentirte mucho más ágil en tu día a día y a ganar elasticidad.
Verás que en un par de semanas dejarás de sentirte acartonada y, si padeces de dolores de espalda y cervicales, como ya os expliqué aquí, pueden ayudarte un montón.
< Si durante un ejercicio tienes dolor o molestias de forma continuada no lo hagas:
Seguramente estas haciendo algo mal así que prueba a dejar de hacerlo una temporada y a volver a intentarlo cuando estés más en forma.
Si el dolor o las molestias son constantes durante todos los ejercicios es probable que tengas alguna lesión y deberías acudir a un fisioterapeuta, mientras tanto es mejor que bajes el ritmo unos días.
Eso sí, hay que diferenciar lo que es el dolor normal que puede producir realizar algún tipo de ejercicio del dolor fruto de una lesión.
En el caso del primero no se trata de un dolor persistente, dura lo que dura el ejercicio sin molestias posteriores, e irá menguando a medida que vayas cogiendo el ritmo, así que toca esforzarse y aguantar un poco.
< Dosifícate, nada de darlo todo un día y estar para el arrastre durante toda la semana:
No se trata de esto, hay que ser constante que por muchos abdominales que hagas en un solo día no conseguirás un abdomen plano de un día para otro, a no ser que ya lo tengas.
Esto es una carrera de fondo y hay que reservar esfuerzos si no queremos tirar la toalla a la primera de cambio. Qué hemos dicho de los objetivos a corto plazo y las metas asumibles?
< Asegurate de tener una botella de agua bien cerca y que no te de pereza beber:
Cuando hacemos ejercicio sudamos y una buena hidratación es indispensable para nuestro rendimiento. Aquí puedes encontrar algunos pequeños trucos para beber más agua. Y hablando de sudar?.
< No intentes sudar demás a base de taparte como si fueras al Polo Norte:
Lo se, los anuncios de la teletienda han hecho mucho daño, pero para hacer ejercicio tienes que estar cómoda y no ser una sauna ambulante.
Espero que los consejos de hoy os hayan parecido útiles y, si te gusta la idea de hacer ejercicio en casa pero no estás convencida de poder sola, aquí encontrarás toda la información sobre mi servicio de entrenamiento y asesoramiento nutricional a distancia, quienes lo han probado repiten! ¡Nos vemos el viernes!