Elegir los alimentos adecuados puede ayudar a reducir la inflamación, incluso las que afectan a los huesos y las articulaciones. Lo mejor es que estamos de suerte, la dieta mediterránea es una de las más eficientes en la lucha contra el dolor.
Dolor de huesos por la ausencia del cartílago por hada-natura
Entre los dolores más comunes de las articulaciones podemos encontrar:
funcionalidad reducida
hinchazón
dolores menores que suelen acompañar en movimientos frecuentes
rigidez muscular Cuando se habla de inflamación, estos son los signos más importantes a tener en cuenta, y nunca deben ser subestimados.
Las articulaciones son muy sensibles, y también son las partes más afectadas del cuerpo humano en cuanto a inflamación. Si pensamos en nuestro cuerpo veremos que las articulaciones están en todas partes. Si movemos un dedo, las rodillas, los pies… las articulaciones son fundamentales para poder llevar a cabo todos los movimientos que necesitamos para vivir. Las partes del cuerpo más sensibles, y más propenso a la inflamación son:
rodillas
cuello
manos
espalda
hueso del muslo Con los años, estas zonas del cuerpo empiezan a crujir causando malestar e incluso dolores. Muchas veces la primera causa de estos dolores se producen por una falta de colágeno.
El colágeno es una proteína que compone muchos tejidos de nuestro cuerpo: articulaciones, huesos, tendones, piel, pulmones, y no sólo eso, también constituyen una gran parte del tejido cartilaginoso.
La nutrición juega un papel clave en estas zonas de carga del cuerpo que se ven afectadas. De hecho, en ciertos casos la única solución para que se pase el dolor en las articulaciones es la alimentación. ¿Por qué es tan importante la alimentación?. Pues porque hay alimentos que promueven la correcta producción de colágeno, y otros que por el contrario retrasan la regeneración.
Este artículo nos ayudará a descubrir todos los alimentos que sirven para reducir o contrarrestar la aparición de la inflamación, y también todos aquellos alimentos que nos ayudan a mantener la salud de los huesos y dolores, incluso dolor de espalda. (No olvidemos que la postura también juega un papel clave en el dolor de espalda!)
El primer factor de riesgo es el peso corporal. El exceso de peso, además de aumentar la carga sobre los huesos, también aumenta la producción de moléculas que promueven la inflamación, como las citoquinas y o leptinas, lo que lleva, a la larga, a convertirse en un dolor articular crónico. Pensemos por ejemplo en la artritis.
Comer de manera regular y sin excesos es el primer paso a tomar. Una dieta ligera, variada y equilibrada es la mejor opción para lograrlo.
Los alimentos ricos en antioxidantes son bienvenidos, es más, son necesarios. El brócoli por ejemplo, es un alimento rico en antioxidantes.
Es preferible elegir alimentos de temporada, verduras frescas y no congelados.
Consumir alimentos ricos en omega-3.
Suplementos para las articulaciones como CondroAliv con glucosamina, manganesio, MSM y glucosamina.
En conclusión, la dieta mediterránea rica en alimentos frescos, verdura, fruta de temporada y alimentos ricos en antioxidantes (por ejemplo la vitamina C) son la base de una dieta contra los dolores.
Las vitaminas y los minerales son elementos importantes para los cartílagos y para su regeneración, la cual cosa ayuda a reducir la tensión de las articulaciones.
Consejos que seguir:
Comer por lo menos 2 porciones de verduras de temporada
Comer al menos dos frutas al día
Comer una porción de nueces
Reducir la sal, podemos añadir especias y hierbas para dar sabor a los platos
Consumir pasta y arroz integral
No excederse con las patatas
Alimentos y consejos para las articulaciones por hada-natura