En realidad son muchos los beneficios que se apuntan a la gimnasia acuática, generalmente se recomienda para personas que padecen lesiones o enfermedades de huesos que se les dificulta un entrenamiento habitual, ya que el agua reduce el impacto que sufren las articulaciones, aprovechando las propiedades del agua para mejorar los resultados.
De qué trata el AquaGYM
Las clases tienen una duración de aproximadamente 50 minutos, de forma grupal, el entrenamiento consta de una primera etapa de calentamiento y posterior una sesión de diferentes ejercicios guiados; aeróbicos, estiramientos, etc.
Algunos de estas actividades hacen uso de herramientas como cinturones, tobilleras, mancuernas, entre otros equipos de flotabilidad adecuados para cada persona que desee practicarlo. Uno de los mejores ejercicios es el Aquajump, donde se hace uso de camas elásticas en el fondo del agua para realizar saltos y ejercicios.
Existen también otras ramas para las personas más experimentadas como el AquaCross, donde se requiere una mayor resistencia.
Por ejemplo, se ha desarrollado una nueva tendencia de realizar spinning bajo el agua, donde se es posible aumentar la potencia de las piernas de forma rápida y efectiva. Hasta ahora resulta una forma divertida y todas las personas que lo han practicado están muy contentas.
Beneficios
Es una excelente forma de mantenerse en línea, ya que estimula la oxigenación de los tejidos y el riego sanguíneo.
Mejora la capacidad respiratoria.
Mejora la vitalidad en general, ya que reduce los niveles de estrés y mantiene una vida fitness con un menor impacto.
Se adapta a las necesidades de la persona, incluso muchas personas mayores y de tercera edad optan por practicar AquaGym por el impacto reducido.
Es una forma distinta y divertida de hacer ejercicios, que aprovecha los grandes beneficios del agua y de la natación.
Practica ideal para personas que desean recuperarse de una lesión.
Mejora la flexibilidad y la resistencia corporal de la persona.
Es una forma de aumentar la relajación mientras se mantiene una vida saludable.
Trabaja toda la musculatura corporal, e incluso participa en la corrección posicional.
Las mujeres embarazadas también pueden practicar esta disciplina, con consulta y aprobación previa del médico.
¿Qué se necesita para practicarlo?
Vestimenta – es necesario utilizar la ropa adecuada al agua, trajes de baño, gorro y el uso de gafas (recomendado), la comodidad es lo primordial.
Seguir al instructor – es una actividad guiada por profesionales, esto es necesario para que se eviten lesiones y se enfoque a trabajar todas las necesidades del cuerpo.
Hidratación – se debe consumir agua natural antes, durante y después de entrenar.
Médico – en caso de presentar alguna dolencia muscular se aconseja consultar al médico antes de ingresar al agua.
Alimentación – como en todo ejercicio, una buena alimentación es importante. Preferiblemente carbohidratos complejos y fibra.