Vegetales verdes
En este grupo podemos incluir a los pimientos, las espinacas, el brócoli, las coles, y todo lo que se le parezca. Su principal función para lograr tu objetivo viene de parte de sus propiedades diuréticas, las cuales harán que elimines la mayor cantidad de líquidos que tu cuerpo no necesite, así como su gran cantidad de fibra que ayuda a mantener limpio al sistema digestivo. Además de ello también son ricos en vitaminas como la A, C y ácido fólico; también contienen potasio.
Otra función que debes conocer es que ayuda a combatir enfermedades como la obesidad y la osteoporosis, así como distintas del tipo cardiovasculares.
Frutos secos
A pesar de ser alimentos con un contenido relativamente alto en grasas vegetales, su cantidad de fibra y de proteína ayudan para que puedas entrenar durante largas jornadas con altas cargas de intensidad sin sentir hambre. Para evitar llenar tu cuerpo con sus grasas, debes consumirlos en pequeñas cantidades y sin tostarlos.
También contribuyen a la construcción de masa muscular, evitar bajones de energía durante los entrenamientos, a reducir el apetito y a prevenir enfermedades cardiovasculares.
Cereales
El arroz, el trigo, el maíz, la quínoa, la cebada etc. ya sean en versión integrales o enteras, evitan que piques entre horas ya que dan sensación de estar lleno durante más tiempo. Además de ello, regulan la actividad intestinal y su gran cantidad de fibra mantienen esta zona igualmente cuidada.
Si escoges productos típicos como el arroz o el pan en su versión integral, obtendrás los beneficios de la fibra de una mejor manera y además te estarás obteniendo todas las vitaminas y minerales que se pierden cuando estos alimentos son procesados.
Pescados azules
Los pescados azules más conocidos que puedes incluir a tu dieta son el salmón, el atún, las sardinas y las ostras. Contienen omega 3, los cuales son ácidos grasos esenciales para reemplazar a la grasa que se acumula proveniente de las calorías y además su contenido de proteína va directamente hacia tus músculos.
Productos lácteos sin contenido de grasa
Los cuales pueden ser quesos ligeros y leche/yogur desnatados. A pesar de ser derivado de grasas animales, lo lácteos también se consideran como una de las mejores fuentes de donde podemos obtener calcio, mineral que es esencial para lograr una óptima pérdida de peso en el área del abdomen.
Consumir al menos 1200 mg de calcio al día (lo que se consigue a través de 3 raciones de lácteos) reduce la posibilidad de llegar al sobrepeso. Además de ello, este mineral tiene la capacidad de hacer que nuestro cuerpo elimine más cantidad de calorías durante la digestión.
Los lácteos contienen otro par de ácidos grasos conocidos como Omega-e y CLA, los cuales también ayudan a reemplazar las grasas de las calorías que ingerimos al comer y, por ende, hacernos perder peso.
Frutas de diferentes tipos
En este punto debes tener en cuenta principalmente a los limones, limas, sandías, fresas, pomelo, y otros cítricos. Este tipo de frutas son muy ricas en vitamina C, beta carotenos y antioxidantes que funcionan a modo de antiinflamatorio. La forma en la que te ayudan a perder peso es a través de la fibra, el agua y el potasio como diurético.
Obviamente esta alimentacion aunada a una excelente rutina de ejercicios diarios.