Pues un postre increíble apto además para veganos, celiacos, intolerantes a la lactosa y dietas paleo. Una delicia de verano llena de color y aromas, que además no lleva ni un solo gramo de azúcar. Fácil y rápido de hacer y que te aseguro que te va a dejar a ti y a tus invitados, alucinando.
TARTA DE HIGOS CON NARANJA Y CHOCOLATE
(Crudivegana, sin gluten, sin lactosa y paleo)
Si te acuerdas, en mi receta anterior, como no era apta para veganos y vegetarianos, me comprometí en que haría algo especial para ellos. Pues no solo he cumplido con eso, sino que además es también una receta perfecta para aquellas personas que no podemos tomar lactosa o para aquellos que padecen de celiaquía.
Además, estamos en temporada de higos y el otro día cuando entré en mi frutería habitual y los vi no pude resistirme y comprar unos cuantos para hacer algo con ellos porque como ya hemos hablado alguna vez, un buen truco para comer sano sin arruinarse es comprar productos de temporada.
Tal vez estés pensando que los higos no son una de tus frutas favoritas, pero eso no es problema porque te será difícil detectarlos en el resultado final. Tal vez cierto matiz, pero nada empalagoso. Además la combinación de la naranja con el chocolate negro (todo un clásico) es superior.
Como la tarta que salió era bastante grande, el otro día le llevé un trozo a mi alumna de prácticas en el colegio. Ella me avisó de que los higos no le gustaban mucho, pero cuando la probó me dijo que le encantaba.
La gran desventaja es que solo se puede hacer cuando haya higos frescos, aunque creo que se pueden hacer variantes con otras frutas de consistencia no demasiado líquida.
TARTA DE HIGOS CON NARANJA Y CHOCOLATE
(Crudivegana, sin gluten, sin lactosa y paleo)
Tiempo de preparación 60 minutos + 8 horas de reposo en congelador
Dificultad: muy fácil
Raciones: 12
INGREDIENTES
BASE:
100 g. de harina de almendras (almendras molidas muy fino)
2 higos frescos
2 cucharas de postre de cacao en polvo puro
3 cucharas de postre de sirope de arce o de sirope de malta de arroz
1 cuchara de postre de semillas de chia
Un pellizco de sal marina
RELLENO:
350 g. de anacardos (previamente remojados durante 2 horas)
80 g. de coco rayado
125 ml. de sirope de arce o de malta de arroz
50 gr. de aceite de coco virgen
250 ml. de zumo de naranja natural (equivale más o menos a 2 naranjas de zumo)
125 ml. de agua de coco
Ralladura de 1 naranja
1 cuchara de postre de cúrcuma molida
5 higos frescos
COBERTURA:
70 g. de aceite de coco virgen
60 ml. de sirope de arce o de malta de arroz
20 g. de cacao puro en polvo
DECORACIÓN:
50 g. de pistachos pelados
2 higos
Alguna fruta roja como fresas o frambuesas
INSTRUCCIONES
PARA LA BASE
1. Pela los higos.
2. Pon todos los ingredientes en una batidora o un robot de cocina y tritura hasta que quede una especie de masa para galletas.
3. Extiende esta masa en un molde para tartas de aproximadamente 26 cm. Para que te sea mucho más fácil desmoldarla luego, puedes cubrir la base del molde con plástico de envolver alimentos.
4. Guarda en la nevera.
PARA EL RELLENO
5. Pela los higos y ponlos junto con el resto de ingredientes en la batidora y bate. Esta masa será bastante espesa, por lo que puede que te lleve un rato o que tengas que parar a veces para que la batidora se enfríe.
6. Una vez la masa esté lista, extiéndela encima de la base.
7. Si tienes un táper hermético lo bastante grande como para que quepa el molde de la tarta, introdúcela en él y ponlo en el congelador. Si no lo tuvieras, como es mi caso, envuelve lo mejor posible con plástico de envolver alimentos el molde para que no le entre hielo y ponlo en el congelador. Deja ahí unas 8 horas o hasta el día siguiente.
PARA LA COBERTURA
8. Bate todos los ingredientes de la cobertura con una varilla de batir o un tenedor. En caso de que el aceite de coco esté cuajado, puedes poner toda la mezcla al baño María para que el aceite se suavice y sea más fácil mezclarlo.
9. Saca la tarta del congelador y echa por encima el chocolate decorando la tarta. En un par de minutos, gracias al frío de la tarta, el chocolate se cuajará.
10. Decora con pistachos pelados, enjuagados (para eliminarles el exceso de sal) y secados un poco, y si quieres, unos trocitos de fresas.
¡A disfrutar!
IMPRESIONANTE, en serio. De esas tartas que te la cuentan y no te suenan super apetecibles pero que cuando la pruebas no te lo crees.
Lo más triste de todo, es que se acaba super pronto. :_(
Espero que haya un acontecimiento festivo antes de que se acabe la temporada de higos para hacerla otra vez. Aunque tal vez haga una versión mini para poder disfrutarla otra vez.
Si te animas a hacerla, algo que te recomiendo, me encantaría saber tu opinión.
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Te mando un abrazo y un trocito virtual de esta sanísima tarta.
Ana
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