A veces, sentimos un auténtico abismo cuando nos exponemos a situaciones que nos dan miedo. Es como si perdiéramos el control de todo y entonces quedamos inmersos en el vértigo de lo que puede pasar. Y curiosamente, cuando tenemos miedo, en la mayoría de las ocasiones nos ponemos en lo peor. El miedo es un sentimiento que duele y que nos aleja de nosotros mismos.
Existe un paso que te separa de aquello que da miedo. Un paso que puede tener más o menos altura, mayor o menos longitud pero que se traduce en miedo. Miedo a que algo salga mal, temor al fracaso, miedo al éxito y a los cambios que pueden producirse en el estilo de vida, inseguridad ante lo desconocido, miedo al qué dirán… El miedo tiene muchas formas y matices. ¿Cómo superar esa ansiedad que puede generar el miedo cuando nos centramos en él en lugar de en aquello que nos ilusiona?
Consejos para alcanzar tu objetivo
En primer lugar, céntrate en tu objetivo y visualízalo cuantas más veces mejor. A través de internet puedes consultar música que puede inspirarte para proyectar un futuro esperanzador. Escucha canciones con una temática totalmente positiva y un mensaje agradable.
Por otra parte, también es recomendable que te marques unos plazos de tiempo para lograr tus objetivos, poner fecha a las metas y contextualizarlas en el tiempo también te ayuda a evitar esa tentación tan frecuente de posponer las situaciones que nos dan vértigo. Creyendo que mañana será un día mejor para lograr ese fin.
Por otra parte, ante los miedos que nos asustan debes tomar conciencia de que solo nosotros podemos afrontarlos. Los amigos pueden echarnos una mano, darnos una palabra de aliento pero nadie puede vivir por nosotros. Además, te harían un flaco favor si alguien asume por ti toda responsabilidad. En cada paso que damos, aprendemos. O al menos, tenemos la oportunidad de hacerlo.
Los miedos pueden hacer que afloren todavía más nuestras debilidades, incrementando la inseguridad, pero también pueden ayudarte a hacer que brille el héroe que hay en ti. Esto ocurre cuando tomas conciencia de tus fortalezas y te das cuenta de que cuando tienes miedo, tiendes a magnificar los obstáculos como consecuencia de la visión en forma de túnel.
El miedo forma parte de la vida
El miedo forma parte de la vida, por tanto, el mejor modo de hacerle frente no es evitarlo sino avanzar. Escribe tus miedos en un papel, esos que ahora mismo son los que más te bloquean. Y elige uno entre ellos, el que quieres centrarte ahora mismo y durante los próximos meses, para trabajarlo y desarrollar nuevas herramientas de actuación. Por ejemplo, si tu miedo es hablar en público puedes marcarte el propósito de ir todas las semanas a una conferencia para hacer una pregunta al ponente en la ronda de coloquio. El mejor modo de desarrollar nuevas habilidades es a través del entrenamiento.
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