La mayor parte de los lípidos que lo constituyen son ácidos Omega 3, que ayudan a reducir los niveles de colesterol y de triglicéridos en sangre.
Es el pescado azul con menor contenido en grasas, responsable de aumentar el riesgo cardiovascular. Además, su contenido en vitamina D, facilita la absorción a nivel intestinal del calcio; así como su fijación en los huesos.
El atún destaca por su riqueza proteínica, superior a la de muchas carnes, aumentando el nivel de saciedad del estómago y favoreciendo la quema de grasas.
El atún destaca por su elevada cantidad de vitamina del grupo B, esencial para mantener los nervios y mejorar el aprovechamiento de los nutrientes; así como, vitaminas liposolubles A y D y minerales (Fósforo, magnesio, hierro y yodo).
Contiene:
Vitamina B12, un nutriente que ayuda a prevenir la demencia.
Fósforo y vitamina D, que favorece a la absorción del calcio, fortaleciendo los huesos y ayudando a prevenir sus posibles fracturas.
Las grasas cardiovasculares de este pescado, ayudan a reducir el colesterol malo, por lo tanto, ayudan en la prevención de trombos y protegiendo el corazón y nuestra piel por dentro.
Ayuda a reducir la inflamación y calmar el dolor de las articulaciones afectadas por la artritis.
El atún contiene dosis considerables de hierro; además es el pescado con mayor contenido en proteínas esenciales para el correcto funcionamiento de los músculos. Junto con el pollo y el pavo, constituye una de las principales fuentes de proteína para los deportistas, y convirtiendo este alimento excepcional en una parte indispensable de la dieta.
El consumo regular de omega 3, presente en el atún y en otros pescados azules, permite reducir los factores de riesgo coronarios, la hipercolesterolemia, la hipertensión arterial, la diabetes, el sobrepeso y la obesidad.
Podemos consumirlo de varias maneras:
Fresco, congelado o en conserva, de ambas maneras poseen un valor nutricional similar, aunque las conservas pueden contener más sodio y potasio y una menor cantidad de selenio.
No obstante, como en todos los alimentos, también existen, contraindicaciones, como en el caso de las personas que padecen hiperuricemia, ya que han de tener especial precaución en el momento de consumir atún, por su contenido en purinas.
Podemos incluir este alimento en infinidad de preparaciones, como: en ensaladas, con pasta, sándwiches, pizza, etc..