¿Por qué dejó de comercializarse?
La amineptina tenía efectos estimulantes y un potencial adictivo que llevó a las administraciones de salud a prohibir su venta. Ya hace cerca de 20 años que no se comercializa y forma parte del listado de sustancias controladas. Hoy exploramos las características principales del grupo de antidepresivos que conforma, su forma de accionar y los efectos secundarios que puede generar.¿Qué es la amineptina?
Se trata de una droga atípica del grupo de los tricícliclos. La empresa farmacéutica francesa Servier presentó esta droga en los años sesenta como forma de tratamiento para la depresión clínica severa de origen endógeno. Poco después de su lanzamiento, la amineptina se volvió bastante popular porque, además de los efectos antidepresivos, producía efectos excitantes. Estos efectos eran de poca duración pero muy agradables, de acuerdo a lo explicado por los pacientes que explicaban su preferencia por esta droga.Debido a estas posibilidades estimulantes, empezó a haber gente que utilizaba la amineptina de manera lúdica. Una vez extendida su comercialización en varios países de Europa, aparecieron casos de hepatotoxicidad por abuso, y algunos de gravedad importante. Las autoridades sanitarias debieron suspender la autorización para su venta.
En España, por dar un caso, dejó de comercializarse en 1999. La amineptina se vendía con el nombre comercial de Survector, y la medida luego se extendió a otros países del continente. En Estados Unidos en cambio, nunca se aprobó la venta de amineptina.
El funcionamiento de los tricíclicos
Los fármacos tricíclicos fueron descubiertos en los años 50. Durante varios años fueron la primera opción a la hora de realizar tratamientos contra la depresión. Aún se siguen utilizando para el tratamiento de trastornos de ánimo, pero fueron reemplazado en gran mayoría por otros grupos de antidepresivos.Este tipo de drogas tienen algunas características químicas similares a las fenotiazinas, medicamentos antipsicóticos que alivian los síntomas y el sufrimiento de alteraciones emocionales y trastornos mentales graves, pese a sus efectos secundarios.
Hoy la preferencia de usar otros antidepresivos se desprende de la gran cantidad de efectos secundarios que generan los tricíclicos. Los más populares en la actualidad son los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) o los inhibidores de la recaptación de serotoninas y noradrenalina (IRSN).
¿Qué efectos secundarios tiene la amineptina y los tricíclicos en general?
Problemas dermatológicos, aparición de casos de acné en diferentes niveles de intensidad y partes del cuerpo.Alteraciones psiquiátricas, excitación psicomotora; en casos poco frecuentes: insomnio, irritabilidad, nerviosismo e ideas suicidas.
Potencial de abuso y dependencia, si bien el riesgo de adicción es bajo, se detectaron numerosos casos de dependencia.
Complicaciones hepáticas, el consumo regular de amineptina puede generar hepatitis.
Problemas cardiovasculares, posible aparición de casos de hipotensión arterial, síncopes o palpitaciones.