Feliz día a todos!Vamos con ganas a por otra semanita! Hace tiempo hablamos de un tema bastante curioso y hoy me gustaría explicar más cosas sobre los magníficos probióticos! A mí personalmente, es un tema que me parece muy interesante, ya que nos ayudan a tratar muchas patologías.
Para resumir un poco, os dejo algunos puntos calves sobre los probióticos:
- hay que tomarlos a primera hora del día, separados de la comida unos 15 minutos. Y si estamos tomando antibiótico unas 3 horas, con un gran vaso de agua.
- NO todos los probióticos sirven para lo mismo, cada uno ejerce su acción específica!
- si sales de una enfermedad, tienes diarrea o has tomado antibióticos, te ayudarán a recuperar antes.
- aumentan nuestras defensas
- te ayudan si tienes gases, ¡en bebés con cólico del lactante!
- para nosotras, si tenemos problemas vaginales
Una vez con las ideas claras podemos decir los diferentes tipos de probióticos que tenemos en cuanto a sus usos:
- Para mantener aumentar las defensas: Lactobacilus acidophilus, Bifidobacterium animalis.
- Para los bebés: Lactobacilus reuteri
- Al tomar antibióticos: Saccharomyces boulardii, Lactobacilus rhamnosus GG, Lactobacilus casei, Lactobacilus acidophilus, Lactobacilus GG
- Diarrea infecciosa: Lactobacilus rhamnosus GG, Saccharomyces boulardii
- Síndrome de colon irritable: Bifidobacterium infantis.
- Enteritis inflamatorias: Saccharomyces boulardi
- Alergias y eccema: Lactobacilus acidophilus, Lactobacilus reuteri, Lactobacilus fermentum, Lactobacilus GG
- Prevención de infecciones urinarias: Lactobacilus rhamnosus GR-i, Lactobacilus reuteri. Hoy en día, nos bombardean con anuncios de yogures enriquecidos con probióticos, leches y demás… ¿Pero realmente sirven?
Cuando tenemos una enfermedad como las que hemos comentado – NO, ya que no van en dosis suficientemente altas para tratar de luchar con los microorganismos patógenos que nos producen esa diarrea, o esos gases o esa infección ¡Un asco, cómo nos manipulan¡ Mirad las etiquetas de estos productos, y el chasco es monumental¡
Mi recomendación es que si hay alguna patología de las que hemos hecho referencia, os busquéis un probiótico de calidad, con las cepas de microorganismos que tenga evidencias de su utilidad para lo que queremos tratar. Y por supuesto es recomendable buscar productos que contienen una amplia variedad de lactobacilos y bifidobacterias.
Bueno es todo por hoy, nos vemos la semana que viene! ¿Por qué todavía no piensas en verde?
Para más información:
Raakel, L., Kirsi, L., Merja N., Erika I. Impact of maternal probiotic-supplemented dietary counselling n pregnancy outcome and prenatal and postnatal growth: a double-blind, placebo-controlled study. British Journal of Nutrition 103, 1792-1799 (2010)
Davidson, L.E., Fiorino, A.M., Snydman, D.R. & Hibberd, P.L. Lactobacillus GG as an immune adjuvant for live-attenuated influenza vaccine in healthy adults: a randomized double-blind placebo-controlled trial. Eur J Clin nutr. 65, 501-507 (2011)
Szajewska, M.Wanke, B. Patro. Meta-analysis: the effects of Lactobacillus rhamnosus GG supplementation for the prevention of healthcare-associated diarrhoea in children. The Medical University of Warsaw, Poland, 2011.
Horvath, A., Dziechciarz, P. & Szajewska, H. Meta-analysis: Lactobacillus rhamnosus GG for abdominal pain-related functional gastrointestinal disorders in childhood. Aliment Pharmacol Ther 33, 1302-1310 (2001)
Sociedad Española de probióticos y prebióticos www:sepyp.es
Fuente: este post proviene de Blog Apoteca Verde, donde puedes consultar el contenido original.
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