Durante la primera fase, que dura pocos minutos, hay despertares frecuentes y los ojos se mueven lentamente. El cuerpo aún percibe lo que ocurre a su alrededor.
En la segunda fase (10-20 minutos) el sueño se hace más profundo y el movimiento de ojos se detiene. Las ondas cerebrales también se vuelven más lentas.
La tercera fase dura entre 15 y 30 minutos y es una de las etapas iniciales del sueño profundo.
No es hasta la cuarta fase (de 15 a 30 minutos) cuando el cuerpo está listo para descansar física y psicológicamente. Es aquí cuando aparecen algunas imágenes relacionadas con las cosas que soñamos. Y la quinta y última fase comienza 90 minutos después de quedarnos dormidos. Se trata de la fase REM en la que soñamos. Aquí aumenta la frecuencia cardiaca y la pérdida del tono muscular.
Lo cierto es que con tanta actividad y estimulación tecnológica resulta complicado dormir las 8 horas que deberíamos. ¿Alguien lo consigue?