La ansiedad y la depresión pueden ser los principales factores predictivos de afecciones que van desde enfermedades cardíacas y presión arterial alta hasta artritis, dolores de cabeza, dolor de espalda y malestar estomacal, y tienen efectos similares a los factores de riesgo establecidos desde hace mucho tiempo, como fumar y la obesidad, según una nueva investigación realizada por investigadores de la Universidad de California – San Francisco, publicada en diciembre de 2018 en la revista Health Psychology.
Sin embargo, mientras que un examen físico generalmente implica un control de peso y preguntas sobre hábitos poco saludables como fumar, los proveedores de atención médica pueden pasar por alto una pregunta crítica: ¿Está deprimido o ansioso? Esta es una de las cuestiones que este nuevo estudio analiza.
En el estudio se analizaron los datos de salud de más de 15.000 adultos mayores en cuatro período del año. Los investigadores encontraron que el 16 por ciento sufría altos niveles de ansiedad y depresión, el 31 por ciento eran obesos y el 14 por ciento eran fumadores actuales. También se encontró que los participantes con altos niveles de ansiedad y depresión enfrentaban un aumento del 65 por ciento en las probabilidades de padecer una enfermedad cardíaca, 64 por ciento para el accidente cerebrovascular, 50 por ciento para la presión arterial alta y 87 para la artritis, en comparación con los que no tenían ansiedad y depresión.
“Estas probabilidades aumentadas son similares a las de los participantes que fuman o son obesos”, dicen los investigadores. “Sin embargo, para la artritis, la alta ansiedad y la depresión parecen conferir mayores riesgos que el fumar y la obesidad”.
El cáncer es una excepción a las condiciones afectadas por la depresión y la ansiedad. A diferencia de las otras condiciones investigadas, los autores encontraron que los altos niveles de depresión y ansiedad no estaban asociados con la incidencia de cáncer. Esto confirma los resultados de estudios anteriores, pero contradice una idea predominante compartida por muchos pacientes.
Los investigadores descubrieron que los síntomas como dolor de cabeza, malestar estomacal, dolor de espalda y falta de aliento aumentaron exponencialmente en asociación con un alto estrés y depresión. Las probabilidades de dolor de cabeza, por ejemplo, fueron 161 por ciento más altas en este grupo, en comparación con ningún aumento entre los participantes que eran obesos y fumadores.
Tratar la salud mental puede reducir los costes en atención médica
Los investigadores explican que los síntomas de ansiedad y depresión están fuertemente relacionados con la mala salud física; sin embargo, estas condiciones continúan recibiendo atención limitada en los entornos de atención primaria, en comparación con el tabaquismo y la obesidad.
Los resultados del estudio subrayan los costes a largo plazo de la depresión y la ansiedad no tratadas. “Sirven como un recordatorio de que tratar las afecciones de salud mental puede ahorrar dinero para los sistemas de salud”, dicen.
Ejercicio para combatir la depresión y la ansiedad
Diversos estudios han puesto de manifiesto que hacer ejercicio con regularidad ayuda a combatir la depresión y la ansiedad.
Con el #RetoPuntoSeguro mantener un estilo de vida activa te ayudará conseguirá muchas más recompensas. Además, conseguirás excelentes recompensas a la renovación de tu seguro de vida, simplemente por hacer ejercicio.