No soy una gran conocedora de la astrología, menos aún de la astrología china, pero como ocurre con todos los saberes ancestrales, me produce curiosidad y respeto. Es por ello que no voy a escribir hoy un post extenso y profundo.
Lo que me lleva a escribir este artículo, es la creencia de que sí hay épocas más propicias que otras para el desarrollo y canalización de determinadas energías, que bien aprovechadas, nos pueden ayudar en nuestro camino, y las de este año de la cabra que comenzamos, me parecen especialmente relevantes.
La cabra nos enseña que, no importa lo que pase, “siempre tira al monte”. No le importa la cantidad de pedruscos que tenga que sortear en su camino, ella, con alegría, sabe que cuenta con los recursos necesarios para alcanzar su meta. Ella no se pierde, confía plenamente en su GPS interno.
Así, las energías a desarrollar en este nuevo año son las siguientes:
CONFIANZA. Confianza en los propios recursos, en nuestra esencia, en nuestro propósito de vida, en nuestro poder interior.
CREATIVIDAD. Es el momento de enfocarnos en el mejor resultado posible. Visualizar, con confianza y creatividad, cuál es el mejor resultado de aquello que queremos conseguir, cómo utilizar nuestros recursos para hacer algo original, que lleve nuestra marca personal, lo máximo que hay dentro de nosotros, construyendo algo único.
ORDEN Y ARMONÍA. El año de la cabra tiene mucho que ver con la paz en nuestro entorno, en nuestras relaciones más próximas. Nos invita a crear espacios limpios, armónicos para que la energía fluya mejor.
EMPODERAMIENTO Y HONRA A NUESTROS RECURSOS. Es un buen momento para empoderarnos, que no es ni más ni menos que honrar los recursos de los que estamos dotados, sacarlos ya del vientre de la ballena ( puedes leer aquí las causas que nos llevan a encerrar nuestro poder interno) y ser la mejor versión de nosotros mismos, lo que nos otorga una sensación de empoderamiento que no obtenemos de ninguna otra manera.
LIBERACIÓN DE APEGOS Y ADICCIONES. En la misma línea, para poder realmente SER, debemos librarnos de lo que no somos, y no somos nuestras adicciones ni tampoco nuestros apegos. La cabra nos invita a la Independencia, a la Libertad.
DELEGAR. Hemos dicho que es un buen año para las relaciones armónicas, y es dentro de esas relaciones donde podemos dedicarnos a lo nuestro, a ese SER del que hablábamos, y, al igual que debemos liberarnos de adicciones y apegos, también del control absoluto. Debemos canalizar nuestra energía en nuestro camino, y supone un desperdicio de recursos andar perdiendo enfoque en tareas que podemos delegar. No estamos solos, no tenemos porque hacerlo todo.
SER CONSCIENTES DEL AQUÍ Y AHORA. Para desarrollar nuestros recursos, para estar atentos a las oportunidades, a nuestras relaciones, para poder disfrutar con alegría, pues la alegría pertenece siempre al momento presente.
CULTIVAR NUESTRA ORIGINALIDAD,AUTOESTIMA Y DIPLOMACIA. EL año de la cabra se caracteriza también por cierta impulsividad en las formas. Existe el riesgo de empecinarnos en nuestras opiniones y expresarlas de modo poco amable…Así que no debemos olvidar que creer en nosotros y en lo que nos hace diferentes, no nos da derecho a avasallar a quién no piense de la misma manera.
Os animo a escuchar el maravilloso trabajo realizado al respecto por los “hermanitos” de la página Susurros de Amor ( que podéis seguir a través de facebook) que continuamente están compartiendo recursos y sabiduría.
Fuente: este post proviene de Pharo de Logos, donde puedes consultar el contenido original.
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