Cada vez me levanto más temprano y me voy de marcha. Me voy encontrando día a día más ágil y sinceramente las veces que me acuerdo del cigarro, son menos cada día. Sigo echándolo de menos, en muchas ocasiones y alguna que otra vez he vuelto a "pecar". La realidad es que ya estaba traspasando el límite. Caían cerca de dos paquetes diarios y eso reconozco que es una barbaridad.
Hoy he empezado a correr. Muy poquito... unos minutos, pero me he quedado asombrada de ver que ya no me ahogaba. Se ha venido mi hijo conmigo y me ha dicho que se sentía orgulloso de mi, eso me ha puesto más ancha que larga.
Bueno a ver el fin de semana cómo se presenta. Espero poder superarme.