Hoy celebramos el Día Mundial de la Salud. Una jornada muy importante de concienciación para alcanzar el bienestar. En esta jornada del 7 de abril, el motivo principal de este año es recordar la importancia de la depresión pese a que esta enfermedad en ocasiones está sometida a una gran invisibilidad social. O incluso, pese a que existen muchos estereotipos en torno a la misma. Por ejemplo, se tiende a creer que la depresión es un tema de adultos pero no de niños. La realidad es que la depresión puede afectar a personas de todas las edades y todos los estratos sociales.
Existen distintos tipos de depresión. La depresión exógena es aquella que está producida por circunstancias concretas de la vida que marcan un punto de inflexión en el destino del protagonista. Por ejemplo, la muerte de un ser querido, el desempleo de larga duración, la soledad negativa o la frustración de no haber conseguido sueños importantes. La depresión endógena, por el contrario, es aquella que no tiene un matiz circunstancial y cuya causa es más interna, es decir, suele estar producida por algún cambio fisiológico.
Consejos para prevenir la depresión
1. Intenta mantener un estilo de vida activo, pero sin convertir esta inercia en la ocupación constante puesto que sentirte desbordado por las responsabilidades también puede producir un estrés incómodo.
2. Cuidas de tu salud emocional cuando cuidas también los aspectos más básicos de tu vida. Un descanso saludable, una alimentación que cubre tus necesidades nutricionales y práctica de ejercicio físico.
3. Expresa tus sentimientos y emociones con libertad. No estigmatices ningún tipo de emoción por etiquetarla como negativa. Existen emociones agradables y desagradables. Pero no conviene hacer una clasificación de buenas y malas.
4. El trabajo es importante en tu vida. Pero también lo es el descanso. ¿Qué actividades te ayudan a desconectar? ¿Qué espacios disfrutas de un recreo personal? El ocio es una de las mejores formas de terapia de salud emocional.
5. Disfruta de tu casa en el sentido de hacer de tu hogar un lugar con vida, y no únicamente un espacio de paso. Llena tu hogar de luz y de una decoración que proyecta vitalidad.
6. Ten una visión realista de la vida. Existen los problemas de un modo inevitable, existen los inconvenientes. Por tanto, acepta estos elementos como partes del juego de la experiencia del vivir. Busca apoyos para superar los problemas,
7. Busca el contacto con la naturaleza porque el aire puro y los colores de los paisajes naturales elevan tu estado de ánimo a modo de causa y efecto. Este espacio incrementa el nivel de serenidad, energía creativa, bienestar y optimismo. Por tanto, organiza excursiones, paseos y picnics al aire libre. La primavera invita a ello, pero en cualquier momento puedes hacerlo.
8. Fomenta la lectura como un hábito que estimula tu mente con conciencia. Es decir, eleva el nivel de autoconocimiento.
Por tanto, cuida tu salud emocional: hoy y siempre.
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