Y es que es muy difícil no dejarse arrastrar por la situación. Todo el día en casa sin poder salir, haciendo mucha menos actividad física de lo habitual, incluso aunque entrenemos un ratito en casa. Si a eso le sumas que al estar todo el día sin poder salir comemos más de lo recomendable, y no elegimos las mejores opciones… Los kilos de más están casi garantizados.
Y eso, sin tener en cuenta que muchas personas intentan llenar las largas horas del confinamiento haciendo repostería.
Conclusión, cuando el confinamiento termine muchas personas, además de haber ganado unos cuantos kilos, habrán empeorado de forma considerable su salud general.
En estos días de encierro están aumentando los problemas relacionados con el sobrepeso como el incremento del colesterol LDL, más conocido como el colesterol malo, o problemas de hipertensión.
Así que si no queremos que esta situación, que se está alargando mucho más de lo deseable, nos acabe pasando factura tenemos que empezar a ponerlo remedio desde ahora mismo.
¿Y cómo lo hacemos? Moviéndonos más y comiendo mejor.
Ya os he contado lo importante que es hacer ejercicio durante el confinamiento, además ahora que podemos salir una hora al día a pasear o hacer ejercicio lo tenemos un poco más sencillo. Pero no sirve de nada que hagamos un poco de ejercicio si después no cuidamos nuestra alimentación.
¿Cómo podemos reducir el número de calorías diarias sin pasar hambre?
Es muy importante que lleves una dieta saludable y equilibrada. Aquí tienes algunas claves que tienes que seguir.Aumenta el consumo de proteínas.
Las proteínas no solo tienen un mayor efecto saciante que los hidratos de carbono. Además nos ayudan al mantenimiento de la masa muscular, que durante este confinamiento también esta en peligro.Y por si esto fuera poco, su digestión requiere un mayor gasto energético.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) debemos tomar entre 0,8 y 1 gramo de proteína al día por cada kilo de peso.
Aumenta el consumo de agua
Puede que te cueste creerlo pero muchas veces confundimos el agua con la sed. En este vídeo te hablo más a fondo del tema.Ahora que estás todo el día en casa es más que probable que sientas muchas más ganas de comer de lo habitual, pero realmente dudo de que eso que sientas sea realmente hambre, pueden ser causas tan variadas como el aburrimiento o la sed.
Cuando no tengas claro si lo que sientes es hambre o sed bebe un vaso de agua y espera unos 10 minutos. Seguramente la sensación de hambre que tenías se te pasará en más de la mitad de los casos
Una buena idea es tener siempre cerca para cuando tengamos sed.
Come manzanas
Si después del consejo anterior sigues teniendo hambre opta por comer una manzana.Las manzanas además de ser sanísimas y tener muy pocas calorías también contienen pectina, un polisacárido que nuestro cuerpo no puede digerir y actúa como una fibra alimentaria. Aquí tienes más razones para comer manzanas.
Divide las comidas grandes en raciones más pequeñas
En lugar de hacer 3 grandes comidas es mejor que dividas esa cantidad de comida en raciones más pequeñas. De esta forma evitarás sentir hambre durante todo el día y probablemente acabes comiendo menos.Busca ayuda profesional si la necesitas.
Si en estas circunstancias te cuesta un poco más de lo normal cuidarte puedes recurrir a ayuda profesional. Puedes contar con un nutricionista online que te ayude a conseguir tus objetivos.Por ejemplo, en el centro de nutrición de Júlia Farre no hace falta acudir a una consulta física para que te puedan asesorar y ayudar con tu alimentación de la misma manera que si acudieras a una consulta prensencial. A través de una videollamada (que tan de moda están ahora mismo) podrás conseguir la ayuda que necesitas sin que tengas que poner un pie en la calle.
Eso sí, a la hora de buscar un dietista online asegúrate de que no te va a querer vender productos dietéticos, ni sustitutivos de comidas. Tu alimentación se debe basar en alimentos naturales.
También te tienen que garantizar que la dieta que te prescriban es personalizada para ti y no una de esas que se preparan una vez y se reparten a todo el mundo sin tener en cuenta las características de cada persona, por ejemplo la dieta para una persona con hipotiroidismo no puede seguir la misma dieta que otra que no lo tenga.
Espero que pongas en marcha estos consejos y que el confinamiento no te pase factura.