Cómo trabajar el cuerpo sin hacer deporte

Si no eres como Khloé Kardashian cuyo lugar feliz es el gimnasio y eres más como yo que detesta ir a este lugar, entonces necesitas saber cómo trabajar el cuerpo sin hacer ejercicios. Afortunadamente, es posible saber como hacerlo con unos fáciles consejos.

Para los demás que son adversos al ejercicio, puedes lograr todos tus objetivos de acondicionamiento físico sin tener que ir al gimnasio.

Cómo trabajar el cuerpo sin hacer ejercicios

Si odias ir al gimnasio, no es necesario que vayas. En su lugar, agrega ejercicios breves a tu rutina diaria. 20 flexiones al despertar y 20 más cuando preparas la cena, 10 sentadillas cada vez que tomas un descanso para ir al baño y algunas estocadas mientras te cepillas los dientes son ejercicios fáciles que te quitan unos segundos de tu día, pero cuando se hace de manera consistente, puede marcar una gran diferencia.

En general, agrega más movimiento a tu vida. Incluso si tienes un trabajo de escritorio, pasea a tu perro con más frecuencia, párate mientras trabajas, prueba la jardinería si tienes un jardín, limpia más tu casa, camina a donde puedas, baila mientras cocinas o te preparas, estírate mientras miras televisión y sal para tomar conferencias telefónicas.

Sigue leyendo para conocer los consejos aprender cómo trabajar el cuerpo sin hacer ejercicios.

Sube las escaleras y camina más

Cuando se te dé a elegir entre una escalera mecánica y escaleras tradicionales, siempre usa las tradicionales. Es como una sesión en la escalera integrada en tu día. Del mismo modo, tomar un Uber rápido o conducir puede ser tentador, pero caminar puede mejorar tu salud y ahorrar dinero o gasolina.

Incluso si no deseas realizar caminatas como ejercicio puro, programa más caminatas en tu rutina diaria, ya sea tomando la estación de tren más cercana y caminando unas pocas cuadras más, o eligiendo un bar a poca distancia para encontrarte con amigos.

Programa el tiempo extra para caminar al trabajo, restaurantes o hacer mandados y, naturalmente, estarás mucho más activa en tu vida.

Considera un escritorio de pie o trabaja en la postura

Puede parecer extraño para tus compañeros de trabajo, pero los beneficios de un escritorio de pie pueden valer la pena. Estar de pie, aunque sea solo tres horas al día, puede ayudar drásticamente a mejorar tu salud. Si un escritorio de pie no es una opción y estás sentado en un escritorio las 24 horas del día, los 7 días de la semana, aún puedes trabajar tus músculos y curar tu cuerpo simplemente teniendo en cuenta tu postura.



Una postura adecuada no solo previene lesiones más adelante en el camino, sino que sentarse erguido con los hombros hacia atrás depende de los músculos de los abdominales, la espalda y las piernas cuando se hace correctamente. Ser consciente de cómo te sientas, te pones de pie e incluso te acuestas puede ser increíblemente eficaz para el cuerpo.

Encuentra un entrenamiento que realmente disfrutes

Si le temes y pospones el ejercicio, es posible que no sea el tipo adecuado para ti. Si disfrutas de las actividades pacíficas y conscientes, haz algunos saludos al sol en una clase de yoga. Si te encanta salir a bailar, una clase de baile puede hacer más por ti y por esa salida nocturna que un ejercicio. Si lo tuyo son los deportes, inscríbete en equipos deportivos locales (nos encanta el voleibol de playa en particular). También hay una amplia gama de entrenamientos que utilizan elementos como trampolines o aros de hula que te recordarán a la forma en que te divertías cuando eras niño en lugar de hacer sentadillas en un gimnasio congestionado.

Convierte las tareas del hogar en un ejercicio

Oh, ¿no creías que lavar la ropa o lavar los platos también podría darte bíceps dignos de envidia o glúteos fuertes? Piensa otra vez. Algunas de las tareas domésticas más comunes requieren cierta actividad física incorporada que puede trabajar todas las partes del cuerpo.



Por ejemplo, lavar platos pesados en el fregadero ejercitará tus brazos, ponerte en cuclillas para recoger la canasta de ropa sucia ejercitará tus piernas y barrer puede ejercitar tus oblicuos. Ni siquiera mencionaré el fregar la bañera, aspirar el suelo o hacer jardinería.

Y si haces un montón de tareas seguidas, tu frecuencia cardíaca aumentará para que cuente como cardio.

Consejo adicional: enciende tu lista de reproducción favorita y baila mientras haces las tareas del hogar para tener un poco más de movimiento y motivación. ¡Tu hogar nunca ha estado más limpio!

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Ponte en forma a través de la comida

Hay un dicho que dice que los abdominales se hacen en la cocina, y es cierto que la dieta es una de las piezas más importantes de tu salud y bienestar. Comer más de los alimentos naturales de la tierra que nuestros cuerpos debían comer, y menos de los productos, ingredientes y químicos que nuestros antepasados no hubieran reconocido como alimento, es crucial no solo para el aspecto de nuestro cuerpo, sino también para lo que es más importante, cómo nos sentimos.