He querido centrarme en este último trimestre porque creo que va a ser más especial que otros años. La pandemia nos va a obligar a vivirlo de una manera muy diferente y la planificación con tiempo se vuelve más imprescindible que nunca. Antes de empezar, quiero pedirte varias cosas:
Reserva al menos una hora para esto. Quizá te lleve menos tiempo, pero es importante hacerlo sin prisa, sabiendo que puedes dedicarle todo el tiempo que necesites. Porque, cuanto mejor lo hagas ahora, más fácil te resultará cumplir con tu plan después. Y esto es clave para que sea efectiva ;)
Piensa en la Navidad: para muchas personas, pensar en la Navidad cuando aún no hemos terminado septiembre, puede resultar algo exagerado. Pero créeme, el momento de planificarlo es ahora. Ahora que ya ha pasado la intensidad de la vuelta al cole y ya hemos cogido las rutinas del nuevo curso, es el mejor momento para pensar en ello.
Sé práctica: concéntrate en planificar y nada más. Olvídate de todo lo que tienes que hacer, de agobios y preocupaciones y pon el foco en lo que has venido a hacer, que es planificar. Todo lo demás, que espere. A estas alturas, da igual si salen cosas que deberías haber hecho hace dos meses o si descubres que has perdido tiempo con esto o con aquello. No estás para evaluar, sino para organizar el último trimestre del año. Ya habrá tiempo de analizar lo que se puede mejorar más adelante.
Ahora sí, vamos a ver cómo hacer una buena planificación:
Qué quieres hacer: lo primero es preguntarte cuál es tu meta para este trimestre. Qué quieres conseguir, a qué quieres dedicar tu tiempo. De todas las áreas que conforman tu vida, a cuales vas a dar prioridad este trimestre. Seguramente sean varias y, además, está la Navidad, una época que intensa que suele llenar las agendas de eventos y actividades. Así que elige bien tus prioridades y, por supuesto, no te olvides de ti. Eres clave para que salga adelante todo lo que te propongas.
Qué tienes que hacer para lograrlo: una vez elegidos los objetivos o metas de tu trimestre, toca hacer un listado de todas las tareas y actividades que tienes que realizar para alcanzarlos. Te recomiendo hacer una lista para cada área elegida, por comunas o en páginas diferentes. Desglosa bien cada tarea, de modo que cada una de ellas puedas hacerla en un día.
Cuándo lo vas a hacer: ahora toca coger el calendario. Pero antes de liarte a escribir tareas aquí y allá, anota primero citas, escapadas, y cualquier evento que sí o sí tenga lugar en una fecha concreta. Entonces, y no antes, será cuando puedas empezar a anotar las tareas de tus listas. Se realista. Haz cálculos aproximados del tiempo que te llevará cada una y no olvides dejar espacio para los imprevistos.
Pasa a la acción: esto es cumplir con tu plan. Parece obvio pero debo incluirlo como parte del proceso puesto que es aquí donde muchas buenas planificaciones se van al traste. Pasar a la acción no consiste en empezar las tareas sino en terminarlas. Hacer y tachar de tu lista. Cuando empieces algo, pon el foco en terminarlo. Olvídate de todo lo demás y no pares hasta terminar. Es la única manera de avanzar.
Disfruta del proceso: me parece fundamental. Planificar no tiene que ser aburrido y el día a día mucho menos. Si lo piensas, es un tiempo en el que te conviertes en protagonista, te adueñas del tiempo y decides a qué lo vas a dedicar. Tú tomas las decisiones, tú vas a cumplir con tu plan y vas a ver tus progresos según vayas tachando tareas. No solo es gratificante, ¡sino que es empoderador! La sensación de control sobre tu tiempo, mejorará tu autoestima y te dará confianza para alcanzar todo lo que te propongas ;)
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¿Y tú? ¿Qué planes tienes para el último trimestre del año?
¡Un abrazo!
Sara