¿Cómo diseñar una sesión de entrenamiento futbolístico adecuada?
El primer objetivo es determinar cuál de los múltiples aspectos de nuestro juego queremos mejorar. Cada sesión o tarea de entrenamiento tiene un objetivo específico, y es a través de los distintos ejercicios que podremos ir mejorando el rendimiento, la resistencia y la fortaleza de cada parámetro a tener en cuenta.
La organización de una sesión de entrenamiento suele dividirse en distintas etapas: Calentamiento, Parte principal y Vuelta a la calma. La parte del calentamiento debe durar entre 5 y 10 minutos, luego el entrenamiento principal que se extiende entre 60 y 90 minutos y finalmente un regreso al estado original que vaya reduciendo paulatinamente la exigencia y que tiene una duración de entre 5 y 10 minutos.
Los ciclos de entrenamiento
Dependiendo de la extensión de nuestro plan de entrenamiento, en el los ejercicios de fútbol profesional encontraremos una división en microciclos, mesociclos y macrociclos. Duran entre 3 y 7 días los primeros, 3 a 6 semanas los segundos y 3 a 12 meses los últimos. Cada ciclo tiene objetivos puntuales que deben ser claramente establecidos y llevados a cabo por cada entrenador y deportista de cara a obtener los mejores resultados y mejoras en el rendimiento deportivo.
¿Qué es el Calentamiento?
Esta primera etapa gira en torno a movimientos generales y la introducción de trabajos específicos para músculos y articulaciones que iremos añadiendo lentamente. La idea es ir preparando nuestro cuerpo para ejercicios más específicos que trabajarán a fondo zonas puntuales y características del jugador.
Los calentamientos son entrenamientos generales que luego derivan en tareas de fuerza, técnica, estrategias técnico-tácticas y trabajos tácticos dependiendo el esquema elegido. El calentamiento deja a los jugadores listos para un trabajo de mayor exigencia en la Parte principal.
¿Qué ejercicios realizamos en la Parte principal?
La preparación física, Parte principal del entrenamiento, puede enfocarse en distintos tipos de trabajo. Desde fuerza y coordinación hasta resistencia aeróbica, anaeróbica y flexibilidad. Cada entrenador y jugador irá repasando las zonas en las que tienen que trabajar en cada período. El objetivo final es obtener siempre los mejores resultados generales para explotar las cualidades de un deportista en el menor tiempo posible. Los ciclos de entrenamiento abarcan todas las áreas y en el largo plazo desarrollaremos habilidades futbolísticas para jugar en distintas posiciones, pero cada jugador debe encontrar el momento y las características principales para cada situación.
Estos son algunos consejos para empezar a desarrollar tus técnicas de entrenamiento en fútbol. Puedes desarrollar diferentes estilos y tareas dependiendo las necesidades del equipo, pero al final del día estaremos entrenando para seguir mejorando y convertirnos en buenos futbolistas o en tener un rendimiento alto en este deporte y poder llegar a competir en las ligas del trabajo, en ligas profesionales o simplemente en el fútbol amateur.