¿Llevas mal el cambio de estación?¿Ansiedad por el fin de verano? Te entiendo.
Adiós vacaciones, adiós solecito, adiós vestiditos… Bueno, lo de los vestiditos no te creas, que te estoy preparando un post para el Otoño que verás…
A medida que el clima se enfría y las hojas comienzan a cambiar, Septiembre y Octubre se convierten en meses de transición, tanto en términos de estación como de nuestra propia vida personal. El comienzo de un nuevo curso escolar, los cambios en los horarios de trabajo y el final de las vacaciones de verano pueden contribuir a aumentar nuestros niveles de estrés.
Si haces un cambio de armario cada estación de forma paulatina, podrás comprar nuevas prendas con cabeza y donar o vender lo que ya no te pones.
Sí, se echarán de menos cositas del verano. Sin embargo, el Otoño es una estación en la que aún hace una cierta buena temperatura y, si preparas tus planes con tiempo, podrás disfrutarlos de día.
Es fácil estresarse tratando de equilibrarlo todo para volver a la rutina. Ahora bien, hay muchas cosas que podemos hacer para combatir el estrés de manera proactiva.
Consejos para gestionar el cambio de estación
1. Organízate el cambio de estación:
la vuelta a los horarios laborales y escolares y otras obligaciones típicas de la rutina se llevan mejor si te sientas a pensar cómo organizarlas. El tiempo es un tesoro, maximízalo para hacer planes que te hagan feliz y pasar menos horas en actividades tediosas del día a día. Recuerda que tienes un post de las agendas más molonas del año que te ayudarán sí o sí. En la parte final del post tienes Agendas escolares y agendas perpetuas, perfectas para empezarlas en cualquier momento del año, como ésta tan molona:2. Planea una lista de lectura:
ayúdate de blogs y opiniones de gente que controla. Organiza una lista de por ejemplo 3 libros que quieras leer en tres meses. O apúntate en tu biblioteca cercana o Internet a un club de lectura, y conoce nuevos libros y gente. Yo cojo la lista de libros más vendidos de Amazon, y a empezar a elegir.3. Encuentra un pasatiempo:
cada estación tiene cosas interesantes que hacer. En Septiembre se multiplican los cursos de cualquier habilidad que quieras aprender (pintura, música, cocina, yoga, abrir un blog…), se disparan las matrículas en los gimnasios, las colecciones en los kioskos… Busca algo en lo que realmente te apetezca pasar tiempo un par de días a la semana. Te ayudará a evadir la mente de la rutina, ¡y a mover el cuerpo del sofá!.4. Piensa en la cocina:
en cada estación del año hay productos de temporada, sanos y a mejor precio que merece la pena conocer. Ser creativo en la cocina y probar nuevas recetas con ingredientes de temporada puede ser muy interesante. Desde calabaza asada hasta pastel de manzana, ¡hay infinitas posibilidades por ejemplo en Otoño!. Puedes encontrar multitud de blogs de cocina que te ayudarán a aprender recetas sencillas. Como plan, puedes visitar el mercado de tu localidad de vez en cuando. Ellos saben qué productos son de temporada, más baratos y te contarán recetas.¿Mis favs de Otoño? Poniéndome menos sana, te diré que quiero aprender a hacer bizcochos en taza, así que tengo este libro de Mug Cakes en el punto de mira. ¿Qué hay mejor cuando llega el frío?. Chocolate o té, y un bizcocho rápido sola o con amigos
5. Prepara el cambio de armario:
para mí es una actividad increíblemente aburrida, pero satisfactoria cuando la acabo. No sólo saco del armario la ropa de la temporada que ya no me voy a poner: lo hago gradualmente y voy guardando para donar lo que me queda pequeño o realmente ya no voy a usar más.6. No dejes de socializar con el cambio de estación:
aunque vaya a hacer frío, hay planes interesantes que hacer. En Otoño, planificar por ejemplo paseos a caballo, visitas a museos o cortas caminatas por el monte con el telón de fondo de los árboles con sus preciosos nuevos colores. Apúntate a apps de encuentros grupales -no citas- tanto físicos como virtuales tipo Meetup.Espero que estos planes te hayan gustado ¡y te animes a ponerlos en práctica!.
Te ayudarán a llevar bien el cambio de estación y a acoger con amor los meses del año que menos nos apetecen.