No hay duda que el yogur o yogurt es uno de los alimentos fermentados más incluido en muchas dieta.
Además de ser delicioso, hay muchas otras razones para hacer del yogurt (incluso variedades no lácteas) un elemento básico en la dieta.
8 maneras ese yogur da su salud un impulso serio
Síndrome metabólico: El yogurt que contiene cultivos vivos de la cepa probiótica Lactobacillus plantarum ha demostrado equilibrar los niveles de azúcar en la sangre, los niveles de colesterol y los niveles de homocisteina en las mujeres, todos ellos factores de la condición conocida como síndrome metabólico.
Además de estos tres marcadores, el síndrome metabólico se caracteriza también por contribuir en el aumento de la grasa abdominal y a menudo es un precursor de otras condiciones de salud.
La homocisteina es un marcador de inflamación y puede aumentar el riesgo de más de 50 enfermedades, entre ellas: Ataque al corazón, ictus, Alzheimer, depresión y artritis.
Nota: no todos los yogurt contiene L. plantarum. Compruebe la etiqueta del envase para ver si el yogur contiene cepas vivas de L. plantarum.
Infecciones respiratorias: La cepa probiótica L. casei que se encuentra en la mayoría de yogurt con cultivos vivos ha demostrado disminuir la duración de las infecciones respiratorias y la severidad de la congestión nasal relacionado con infecciones en las personas mayores.
Probablemente tiene el mismo efecto en jóvenes al consumir yogurt, pero este estudio en particular solamente examinó los efectos sobre las personas mayores.
Salud gastrointestinal: Un estudio publicado en The Journal of the American College of Nutrition evaluó los efectos del consumo de yogur de un producto con cultivos vivos de casei L. en infecciones gastrointestinales comunes en los trabajadores por turnos.
Los investigadores encontraron que el consumo de yogurt podría reducir el riesgo de infecciones en el tracto gastro intestinal.
Absorción de nutrientes: Consumir yogurt aumenta la cantidad de nutrientes absorbidos de otros alimentos incluidos en la misma comida.
Un estudio en The International Journal of Food Sciences and Nutrition encontró que el consumo de yogurt aumentó la capacidad de absorción de los fitonutrientes llamados isoflavonas en leche de soya cuando los dos alimentos se incluyen en la misma comida.
Por supuesto, el yogurt de soja fermentada yogur tenga el mismo efecto.
Cáncer: Comer yogur que contiene L. casei ha demostrado poseer efectos contra el cáncer en estudios con animales, según un estudio publicado en la revista médica Immunobiology.
La investigación demostró que la cepa probiótica bloquea el desarrollo del tumor o retrasa su crecimiento al tiempo que mejora la respuesta inmune por lo que el propio sistema inmunológico puede atacar el tumor.
Además, redujo el número de vasos sanguíneos que alimentan el tumor.
Infecciones por H pylori: H. pylori se ha relacionado con úlceras, gastritis y cáncer de los tejidos glandulares y linfáticos en el cuerpo.
Según una investigación publicada en the World Journal of Gastroenterology, la investigación muestra que el consumo de yogurt ayuda a combatir infecciones de H. pylori.
Intoxicación alimentaria y Colitis: algunas cepas de bacterias beneficiosas durante el proceso de fermentación pueden realmente ayudar a prevenir los desperdicios y reducir la probabilidad de sufrir intoxicación.
El Yogurt fermentado con la cepa probiótica L. paracasei protege contra infecciones por Salmonella y puede incluso proteger contra la formación de la colitis.
Compruebe la etiqueta de los yogures que compraste para determinar si contiene esta cepa de probiótico beneficioso, puesto que no todos los yogurt la contienen.
Salud cerebral: La última cosa que probablemente pienses cuando consumes yogurt es cómo puede ayudar su cerebro.
Pero según un estudio en animales publicado en the journal Nutritional Neuroscience, el consumo de suero de leche, un subproducto líquido derivado de la producción de yogur, puede realmente mejorar el aprendizaje y la memoria.
La mayoría de yogurt tienden a contener suero residual. Esto es especialmente cierto en el yogur hecho en casa.
Si bien la mayor parte de los estudios se ha hecho usando yogur fermentado de leche de vaca, ya que parece ser los cultivos probióticos específicos responsables de los beneficios, los mismos beneficios de salud probablemente se puedan obtener de yogur fermentado no lácteos, como el coco, soja (preferiblemente soja orgánica puesto que la soja es un cultivo sumamente modificado genéticamente), almendras y anacardo.
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