Andar en bicicleta es una de las experiencias más placenteras del verano. Incluso, es muy habitual alquilar una bicicleta para conocer mejor el lugar de vacaciones a través de una experiencia de turismo a golpe de pedaleo, especialmente, en aquellos destinos que están muy bien adaptados para los paseos en bici. Andar en bicicleta es una experiencia de bienestar que no solo te permite activar tu cuerpo, sino también, tu mente. Es decir, el ejercicio de pedalear no solo activa tus piernas, sino también, tu cerebro.
El bienestar de andar en bicicleta
Andar en bicicleta es una imagen estival que conecta incluso con el poder de la infancia. De hecho, la bicicleta es un medio de transporte práctico que te permite llevar en tu cesta algún tipo de peso. Por esta razón, si tienes que hacer recados, la bicicleta también puede ser tu aliada.
Contacto con la naturaleza
Una de las ventajas de andar en bicicleta es que disfrutas de unos paisajes de película. Recibes estímulos naturales y sensoriales que no percibes cuando estás inmerso en mitad del estrés de un atasco de tráfico. Por esta razón, la elección de ir al trabajo en bicicleta durante el verano, también es una terapia de bienestar. Mientras que durante el invierno, las condiciones climáticas no siempre acompañan a un buen paseo en bicicleta, por el contrario, el verano es un tiempo ideal para ello.
Este plan es recomendable para personas de edades muy diferentes. Por esta razón, también es una oportunidad para compartir tiempo estival en familia.
Ganas tiempo
Además, mientras que el calor se torna más pesado cuando vas paseando, si tienes que recorrer una distancia para ir de un sitio a otro, reduces el tiempo de exposición al sol si vas en bicicleta. Pero además de ganar tiempo, andar en bicicleta es una filosofía de vida, una actitud ante el presente.
No solo ganas tiempo durante el desplazamiento, sino que también, te cuesta menos tiempo encontrar una plaza para aparcar. Es muy sencillo encontrar un lugar para aparcar la bicicleta.
Promoción de la salud social
Ten presente que cuando andas en bicicleta no solo cuidas tu salud, sino que también, mejoras la salud de la sociedad. Gracias a la reducción de la contaminación ambiental. Mientras que muchas personas tienen dependencia del coche y lo utilizan incluso para recorrer distancias cortas, cuando andas en bicicleta pones en práctica tu actitud proactiva para desplazarte aprovechando esos desplazamientos concretos como una oportunidad para hacer ejercicio físico y disfrutar de esos espacios para ti.
Además, una bicicleta es una inversión que puede durarte muchos años, incluso, durante toda la vida. Por tanto, ofrece muchas ventajas desde el punto de vista de la inversión de calidad y precio. Además, no necesitas mucho espacio de almacenamiento para guardar tu bicicleta. De hecho, puedes guardar la bici en un trastero, en el jardín o en la terraza si no tienes garaje.
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