Estoy ansiosa por compartirles esta receta que inventé ayer. Esta tarta de ricota y dulce de leche es literalmente un sueño! Ni yo podía creerlo cuando lo probé, su sabor es exquisito, inclusive mejor que la común. No tiene manteca, no tiene azúcar, no tiene harina refinada. Es light, fit y que les puedo decir de su sabor mmmmmmmmmmm super wow es la mejor descripción que se me ocurre para cuando la prueben.
Me atrevo a decir que es mi mejor receta por lejos. Tienen que hacerla y por supuesto contarme como les quedó porque tampoco lo van a poder creer.
Que necesito?
Para la masa:
▲ 400 gr. de harina de avena
▲ 12 cucharadas de aceite de coco neutro frío (importantísimo que esté SOLIDO) God Bless You (Lo puedes comprar aquí)
▲ 5 sobres de endulzante (Yo usé sucralosa)
▲ 2 huevos
▲ 10 gr. de polvo de hornear
▲ Esencia de vainilla
Para el relleno:
▲ 300 gr.de ricota magra
▲ 5 sobres de endulzante
▲ 2 claras
▲ 50 gr. de maicena
▲ 200 gr. de dulce de leche sin azúcar
Como lo hago?
Es muy simple de verdad. Primero vamos a hacer la masa. Poner en un recipiente el aceite de coco duro y arriba le vamos poniendo de a poco la harina, previamente mezclada con el edulcorante y el polvo para hornear. Lo que tenemos que hacer en este proceso es, con la ayuda de dos tenedores, ir aplastado el coco y formar como un arenado. No hay que batir! Solo buscar que se formen pequeñas bolitas con toda la mezcla. Incorpar los huevos y la esencia de vainilla. Luego unir hasta haber formado un arenado y volcar en la mesada. Terminar de unir la masa, pero nunca amasar! Colocarla dentro de un papel film y estirarla un poco. Llevar a la heladera por 1 hora.Para el relleno, solo unir todos los ingredientes menos el dulce de leche. Reservar.
Retirar la masa de la heladera y dividir en 2 partes. Una que sea un poco más grande para la parte de abajo. Estirar sobre la mesada espolvoreada con harina y forrar el molde de tarta previamente untado con aceite de coco líquido. (Recuerda cubrir también los bordes del molde). Poner una capa de dulce de leche y luego la mezcla del relleno encima. Estirar la otra porción de masa y colocarla por encima, uniendo los bordes con la masa de abajo. (Si se quiebra un poco, trata de unirla con los dedos pero no te hagas problema, ya que esa va a ser la parte de abajo de nuestra tarta.)
Llevar a horno precalentado a 180° por 35´aprox. o hasta que esté doradita. Esperar que enfríe completamente y con ayuda de un plato darla vuelta.
Y LISTOOOOOO! Puedes espolvorearle por encima un poco chocolate rayado y sucralosa triturada para decorar. Es la mejor tarta que he hecho, no dudes en hacerla!
❤️ ❤️
Fuente: este post proviene de Roma Fit (Recetas y tips para una vida fit muy simple!), donde puedes consultar el contenido original.
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