¿Son todas las calorías iguales?

Hay cosas que parecen simples pero algunas cosas no son tan simples como parecen, por ejemplo las calorías. Si dos alimentos tienen las mismas calorías la lógica dice que los dos deberían “engordar” lo mismo, pero… ¿son todas las calorías iguales?, ¿nos afectan igual 1000 calorías provenientes de chuches que 1000 calorías de pollo a la plancha?

Seguro que muchas veces has oído cosas como “una caloría no es una caloría” o si quieres adelgazar tienes que “quemar más calorías de las que ingieres”, ¿pero realmente son las cosas tan fáciles?, de hecho todos sabemos que comer menos y moverse más es muy importante para la pérdida de peso y sin embargo  la sociedad está más gorda que nunca.

A la hora de tener el cuerpo que quieres tener la forma en la que comes es la responsable de al menos el 80% del éxito o del fracaso, transformar tu cuerpo en un cuerpo bonito el ejercicio físico es fundamental, pero no vale de nada que hagas un entrenamiento súper exigente 5 o 6 días a la semana si tienes una alimentación nefasta, si te alimentas mal por mucho que entrenes tu cuerpo no se transformará de la forma que esperas.

Habrá mejorado tu salud cardiovascular, estarás más fuerte y más ágil pero tu apariencia física seguramente siga igual (o muy parecida) a la de antes.

Así que es muy importante tener las cosas claras respecto a como alimentarnos y si realmente todas las calorías nos afectan igual.

Lo primero de todo es saber qué es una caloría.

¿Qué son las calorías?



La definición “seria” de lo que es una caloría es:

Una caloría es la cantidad de energía calorífica necesaria para elevar la temperatura de un gramo de agua pura en 1 °C (desde 14,5 °C a 15,5 °C), a una presión normal de una atmósfera.

Una caloría (cal) equivale a 4,1868 julios (J),1 mientras que una kilocaloría (kcal) es 4,1868 kilojulios (kJ).

Pero como esta definición nos aclara poco sobre lo que suponen las calorías en nuestro día a día vamos a profundizar sobre ellas

No todas las calorías son iguales:

Obviamente no todas las calorías son iguales, hay calorías vacías, como las del alcohol que no nos aportan absolutamente nada, y hay alimentos que a pesar de aportarnos pocas calorías son muy ricos nutricionalmente hablando.

Tienes que pensar en nuestro cuerpo como en un máquina muy compleja, formada por un montón de piezas que tienen que encajar entre sí, y aunque el número de calorías es importante para que la máquina funcione correctamente, la calidad de esas calorías puede hacer que nuestro cuerpo funcione de forma eficiente o se acabe estropeando. 

Nuestro cuerpo y las calorías

Imagina que tu normalmente no prestas mucha importancia a tu alimentación, comes lo que te apetece y en tu dieta habitual hay hamburguesas, bollería, refrescos… vamos todo lo que se supone que está mal, como media consumes unas 2800 calorías y como quieres perder peso has decido comer menos (que no diferente) y hacer un poco de ejercicio, así que quieres empezar a comer en torno a 2000 calorías pero comiendo los mismos tipos de alimentos. ¿qué crees que va a pasar?

¡Vas a perder peso!, estás comiendo unas 800 calorías menos al día y encima estás haciendo ejercicio, así que vas a perder peso, pero malas noticias… ¡No vas a perder grasa!

He perdido la cuenta de las veces que he hecho hincapié en que en la búsqueda de un cuerpo bonito y saludable lo importante no es el peso es el porcentaje de grasa corporal que tenemos.

¿Cómo reacciona nuestro cuerpo a los alimentos?

Los diferentes tipos de alimentos tienen diferentes efectos en nuestro cuerpo que afectan a nuestra composición corporal y el rendimiento deportivo.

Nuestro cuerpo reacciona de diferente forma con los distintos tipos de alimentos que le damos, por ejemplo y de forma muy general las verduras nos “llenan” más que otros alimentos aportándonos pocas calorías, los hidratos de carbono nos dan la energía que necesitamos (aquí es muy importante distinguir entre los hidratos de carbono buenos y los malos) y las proteínas nos ayudan a construir nuestros músculos.

Los alimentos procesados:

Aquí tengo de nuevo malas noticias, los alimentos procesados nos hacen comer más de la cuenta, seguro que muchas veces te has propuesto comer sólo un par de galletas tipo Oreo, y ¿qué es lo que ha acabado pasando?… un par de galletas se han acabado convirtiendo en prácticamente el paquete entero, pero tranquilo eso nos pasa a todos, por mucha fuerza de voluntad que queramos tener porque este tipo de alimentos están diseñados precisamente para eso, para hacerte comer más.

Pero los problemas no acaban aquí, este tipo de alimentos, con muchas calorías, mucho azúcar pero muy pocos nutrientes nos provocan los temidos picos de azúcar en sangre que nos acaban provocando los ataques de hambre.

Alimentos sin procesar:

Con una dieta rica en verduras, carnes y pescados a la plancha o asados, nos ocurrirá justo lo contrario que con los alimentos procesados, nos podemos sentir saciados consumiendo menos calorías y dándole a nuestro cuerpo lo que necesita, todas nuestras comidas deberían incluir ciertas cantidades de grasas, carbohidratos y proteínas, así que esta es la forma más saludable de perder peso.

¿Pero son iguales las calorías de cada tipo de nutriente?



La respuesta es un NO rotundo.

Pongamos el ejemplo de los hidratos de carbono, no es lo mismo comer de hidratos de carbono provenientes de un plátano que hidratos de carbono de caramelos (aunque en total sumen las mismas calorías)

¿Cuántos caramelos tienes que comer para sentirte igual de “lleno” que con un sólo plátano?, creo que no hace falta responder a esta pregunta, pero además de sentirte más saciado con el plátano también te está aportando otros micronutientes que no vas a encontrar en los caramelos.

Así que yo creo que si queremos comer menos calorías pero no nos queremos preocupar de tener que “contar” calorías simplemente nos tenemos que centrar en elegir los “alimentos correctos”.

¿Cuáles son los alimentos correctos?

Tenemos que tratar de elegir alimentos que nos “llenen” sin que lleguen a ser unas bombas calóricas.

Ya te he dicho antes que todas nuestras comidas deben incluir verduras, proteínas e hidratos de carbono, en cuanto a estos últimos una buena opción es intentar elegir alimentos integrales, ricos llenos de macro y micro nutrientes.

En cuanto a las verduras deberían ser la mitad del plato, y si te quedas con hambre puedes añadir más verduras y proteínas 

Las reglas básicas para elegir nuestras calorías:

Al final todo se reduce en esto: “La dieta perfecta no existe, sólo se trata de comer de la forma más saludable posible”.

Elige comida de verdad.

Come menos comida procesada.

No te tienes porque prohibir nada a no ser que no te puedas controlar (las excepciones de vez en cuando son buenas)
¿Son todas las calorías iguales? es un post de: Operación Bikini