Ya hace un tiempecito que no se ve por aquí alguna receta con fruta, ¿verdad?. Lo cierto es que la fruta de invierno no es precisamente la más emocionante y variada, pero no olvidemos que es la época de los cítricos y es cuando hay que aprovechar para consumirlos.
No es ningún secreto que soy una fanática de los smoothies o batidos y que me encanta hacer miles de combinaciones diferentes, y esta mezcla es buenísima! De alguna forma cuando lo tomas ya sea por su color o sabor, o quizás las dos cosas, ya sabes que te va a hacer mucho bien...
Este smoothie viene ahora al pelo por que es el momento de los cítricos, rebosantes de vitaminas. Aún pululan por ahí catarros y resfriados y vendrán más con el cambio de estación y llegada de la primavera, así que viene bien preparar el cuerpo con una buena inyección de vitaminas para reforzar nuestras defensas.
He usado naranjas sanguinas que además de ser espectaculares visualmente tienen un sabor dulzón buenísimo y las zanahorias ya sabéis que son un clásico que combina fenomenal con los cítricos, especialmente la naranja. Me gusta además aprovechar toda la pulpa de la fruta ya que es donde está toda la fibra. Para contrarrestar un poco el sabor ácido podemos añadir un poquito de sirope de arce que como siempre es el endulzante perfecto, y para añadir cremosidad un platano va fenomenal. Yo los suelo congelar cuando están muy maduros para usar precisamente en estos batidos, y aunque se puede usar perfectamente sin estarlo a mí me gusta más como queda de cremoso y fresquito. Además veréis que añado semillas de cáñamo, una gran proteína vegetal que añade textura y aporta muchos otros beneficios como aceites grasos Omega 3 y 6, vitaminas y fibra.
Vamos, un smoothie que es una bomba multivitamínica, súper saludable y muy pero que muy rico.
Aquí va la receta para este smoothie multivitaminas de cítricos, zanahoria y jengibre.
RECETA DE SMOOTHIE DE CÍTRICOS, ZANAHORIA Y JENGIBRE
INGREDIENTES: (Para 2 vasos)
2 naranjas sanguinas
1 plátano maduro congelado
2 naranjas
1/2 limón
1/2 lima
1 trozo de jengibre fresco pelado
2 zanahorias peladas
2 mandarinas
1 pizca de cúrcuma en polvo
Sirope de arce
Semillas de cáñamo
Agua
PREPARACIÓN:
Primero trituramos bien la zanahoria y el jengibre con un poco de agua para que no queden tropezones después.
Exprime las naranjas, mandarinas, la lima y el limón y vierte el zumo y su pulpa en al vaso de la batidora.
Añade el plátano, una pizca de cúrcuma, un puñado de semillas de cáñamo, un chorro de sirope de arce y bate a alta velocidad para que se triture bien todo, hasta que quede una textura cremosa.
Prueba y añade más sirope si lo quieres más dulce y/o agua si quieres que sea menos espeso.
¡Ya está listo para tomar!