Existe una tendencia habitual en muchos fumadores, posponer el momento de dejar de fumar para una ocasión futura. De este modo, muchos fumadores llevan mucho tiempo con la idea de dejar de fumar, sin embargo, no han materializado esta decisión en la práctica. Sin embargo, el contexto temporal sí es importante. El presente es tu mejor oportunidad. Y concretamente septiembre es un mes que nos trae la fuerza renovada de los nuevos comienzos.
Es decir, de los nuevos inicios que representan la oportunidad de definir nuevos objetivos. ¿Y qué mejor que dar protagonismo a las metas de salud? ¿Por qué septiembre es un buen mes para dejar de fumar?
1. Un anclaje de fuerza
Elegir septiembre como el mes para iniciar este objetivo es muy importante ya que este mes marca un punto de inflexión en la rutina cotidiana. Por esta razón, puedes aprovechar este periodo de cambio para empezar más motivado que nunca con tu meta.
2. Denscanso vacacional
Mientras que más adelante corres el riesgo de estar nuevamente estresado por los compromisos de trabajo y las metas pendientes de cumplir, por el contrario, ahora estás más relajado que nunca gracias a esa agradable sensación de vacaciones recientes. Y esto crea una disposición muy apetecible en tu ánimo.
3. Vuelta a la normalidad
Puede ser más difícil dejar de fumar en verano cuando vives el momento más social por excelencia gracias a las quedadas de los planes con amigos. En ese caso, puedes experimentar la tentación de fumar cuando ves a un amigo que sale a la calle en el restaurante para fumarse un cigarro después del café. A partir de septiembre, retomas tu vida de siempre. Y aunque las relaciones personales siguen presentes, el estilo de vida cambia. Ya que las propias condiciones del otoño invitan a pasar más tiempo en casa.
4. Dejar de fumar antes de que termine el año
Además, también en relación con los planes sociales, si dejas de fumar antes de que lleguen las próximas fiestas de Navidad también las vas a disfrutar mucho más puesto que los sabores se aprecian mejor desde el rol de exfumador. Y también, si iniciaste el año con el deseo de dejar de fumar, podrás cumplir tu propósito si emprendes tu meta de alejarte de este hábito a partir de septiembre. Para muchas personas, el verdadero comienzo de año se produce en este mes. Por tanto, aprovecha la nueva oportunidad que te da el calendario.
5. Cuesta del mes de septiembre
Además, el mes de septiembre viene acompañado por una posible dosis de estrés financiero como consecuencia de los gastos extra de la vuelta a la rutina. Por ejemplo, la vuelta al cole y el material escolar recomendado. Sin embargo, si dejas de fumar, estas dejando de lado un gasto importante que te va a ayudar a ajustar tu presupuesto mensual pudiendo destinar ese dinero que inviertes en tabaco en un fin mucho más agradable y más rentable a largo plazo.
No pongas excusas y elige septiembre como tu inspiración vital para apagar el último cigarrillo que pruebas. ¡Mucha suerte!