Todos los seres humanos tenemos hábitos alimenticios que muchas veces no conjugan bien con el tema de la salud, ya que consumimos alimentos que no tienen ningún aporte benéfico y todo lo contrario nos podría afectar el organismo. Si quieres asesorarte bien, debes visitar a tu nutricionista en Ibi quien te podrá orientar en este tema tan importante. Por ahora podemos ver algunos aspectos generales sobre el tema de nutrición y salud.
La buena nutrición se respalda con la cantidad y calidad de nutrientes que cada persona consume, ya que no se trata de comer mucha cantidad, sino lo que es necesario pero con la calidad requerida para cada persona.
Grupo de alimentos
Existen tres grupos de alimentos: frutas, verduras, legumbres y proteína, todos se deben consumir en la porción indicada por el nutricionista en Ibi, ya quien es la persona indicada para asesorarte. Volviendo a los grupos de alimentos, veamos un poco de sus propiedades: el grupo de frutas y verduras son la fuente de vitaminas, minerales y fibra, son esenciales para el funcionamiento y desarrollo del cuerpo humano; los cereales contribuyen al aporte de energía y las proteínas nos aportan hierro y grasas. Además del consumo de estos grupos de alimentos, debes tener en cuenta que el consumo de agua diario, es fundamental para el organismo.
De las primeras recomendaciones que te hará tu nutricionista en Ibi, será mantener buenos hábitos alimenticios, los cuales no solo consisten en consumir los alimentos anteriormente mencionados, sino que también se apliquen conductas adecuadas, modificando malos hábitos e implementar costumbres sanas, las cuales van a requerir de esfuerzo y disciplina.
Recomendaciones del Nutricionista
El desayuno debe ser la comida principal del día. Para que el día sea más productivo y tengas mucha energía debes tomar un desayuno equilibrado y completo donde tengas presente frutas, cereales y lácteos.
El tiempo entre comidas debe ser de 3 ó 4 horas máximo, no saltar ninguna comida, ni tampoco comer en exceso.
Se pueden implementar opciones saludables como frutos secos, la carne magra y alimentos saludables con un proceso de preparación también saludable como por ejemplo cocido o al vapor.
Realizar cambios en los hábitos puede ser un poco difícil y también podría tomar algún tiempo, se puede empezar de menos a más, si empiezas con cambios pequeños se podría ir evolucionando y notando cambios positivos en tu organismo.
Algunos cambios sencillos que puedes empezar a practicar:
En lugar de preparar la carne en aceite, se puede cocinar o asar en el horno. No olvides retirar la piel del pavo o pollo y consumir pescado una vez a la semana.
Ingiera frutas y verduras que pueden hacer el papel de bocadillos, acompañando sus comidas principales.
La hidratación es un aspecto muy importante para mantener buena salud, usando bebidas hipocalóricas como por ejemplo agua o te.
Reduce al máximo el consumo harinas, grasas, azúcares y aderezos.