Cómo eligen los alimentos los europeos.
Elegir los alimentos que debemos o queremos consumir, no es tarea fácil y los elementos que influyen varían en cada continente, ahora voy a hablar principalmente de Europa. La mayoría de las veces, los patrones socioculturales son los que acaban determinando casi automáticamente los alimentos y la dieta que nos llevamos a la boca a diario, ya que desde un punto de vista cultural, la comida en el 60% de los casos viene acompañada de la hospitalidad de nuestras amistades (cenas, comidas, etc) y en lo general por la vida social que llevemos. Para muchos, los tiempos de comida son vistos como una oportunidad para conocer, dar placer y jugar un papel fundamental, sobre todo en el sur de Europa, y fortalecen en cierta manera los vínculos sociales.
No sólo juega papel la vida social que llevemos, cuando hablamos de la elección de los alimentos, también entra en juego las tradiciones que se tengan en los lugares o el país en que habitemos, ya que los hábitos alimenticios son transmitidos de generación en generación, y a veces pueden ir ligados a creencias religiosas
Aspectos prácticos como los siguientes también influyen en las decisiones en la compra de alimentos, la preparación y el consumo, como el sabor preferido entre otras opciones posibles, el mejor precio o disponibilidad en el mercado de temporada.
Aprender a cocinar debería ser un factor a tener en cuenta en la elección de los alimentos y por consecuencia directa, en nuestra salud.
Ser capaz de preparar la comida, seguir una receta y estar equipado para hacerlo, puede influir en la elección de alimentos a la hora hacerlo en casa, porque no todo el mundo tiene los preparos de un profesional. Tenemos que saber que no todo va acompañado de un buen material en la cocina, ni que hace falta ser chef documentado, como nos venden hoy día la televisión, la preparación alimentaria, es más sencilla de lo que creemos, comer saludable no es caro, ni mucho menos difícil, solo hay que saber cómo tratar a los alimentos que compramos, haciendo una buena elección, poniéndonos las pilas con los alimentos que son sanos y los que no y dejándonos de boberías y excusas, alegando que no sabemos cocinar o que no tenemos tiempo, recordad que el cocinar bien va ligado a vuestra salud y que somos lo que comemos.
Los alimentos tienen un importante papel en en lo que concierne a salud y bienestar, la preparación y el arte de la cocina, tienen el poder de actuar sobre el bienestar y la salud de todos.
Estudios científicos, han demostrado que las habilidades para cocinar va ligada estrechamente con la calidad de las dietas y hábitos socioculturales de cada uno de los países del mundo. Los estudios realizados en el Reino Unido e Irlanda han demostrado un vínculo entre el trabajo o el nivel socioeconómico y las habilidades para la cocina, nos sugiere que la falta de deseo por innovar en la cocina y la falta de ímpetu por aprender a cocinar bien, genera un menor consumo frutas y verduras. Otros estudios europeos piensan que dando ayuda o fomentando el arte de la cocina, podría hacer que los jóvenes se interesasen cada día más por aprender a cocinar y así de esa manera promoveríamos una alimentación más saludable
La salud y la conducta alimentaria está estrechamente ligado y esto puede abrir una gran brecha que puede hacer mucho daño a nuestro organismo central, pasivamente, pero lo hace. En Escocia, han lanzado una iniciativa para poner en práctica un estudio sobre el arte de la cocina en las zonas socialmente desfavorecidas y dio lugar a un efecto modesto pero positivo en la mejora de la elección de alimentos y el crédito dado a la preparación de las comidas, Esto podría ser un buen punto de partida para iniciar un cambio en la alimentación mundial.
¿Los europeos saben cómo cocinar?
En muchos países europeos, la cocina es una parte importante de la cultura y los platos tradicionales se asocian con muchos países. Sin embargo, es preocupante que los jóvenes europeos no adquieran los conceptos básicos para cocinar y les permitan ser autónomos en su elección de comida. Esta degradación de las costumbres culinarias tradicionales en una era culinaria de transición parece tener lugar a pesar de una mayor exposición a los productos frescos.
Por ejemplo en Reino Unido, el 10% de la población cita su falta de conocimiento por el arte culinario, no tienen bases culinarias de ningún lado y por consiguiente limitan su alimentación a comida basura y alimentos preparados. De hecho, el problema es tal que el gobierno de Reino Unido ha insistido en la importancia de mejorar el conocimiento de los jóvenes para cocinar.
No es de esta manera como nos lo vende la televisión, las revistas, los libros, etc, en el que nos venden una imagen de "cocina" muy lejos de lo que es la realidad y lo que significa en realidad, parece que a día de hoy se nos vuelve a olvidad que somos lo que comemos y que lo que comemos es igual a nuestra salud.
Lindanita
Hay quienes por la introducción de la mujer al mundo laboral, y la creciente independencia que han desarrollado las mismas, dicen que la imagen de cocina se está alejando y perdiendo costumbres como antes, ya que la mayoría de los hijos e hijas con quienes aprendían a cocinar era con sus madres, esto hace que las madres tengan una presión extra, y que la venta de comida preparada y precocinada crezca, pero no creo que este sea el problema, ni mucho menos la independencia laboral de la mujer en el mundo social, sino la falta de educación culinaria que no le damos a nuestros hijos y que debería ser otra asignatura tales como las matemáticas.
Hoy en día la idea de cocina y de arte culinario va más allá de lo que en las generaciones de atrás nos han enseñado, creando nuevas ideas de fusión e introduciendo muchos productos frescos en platos muy elaborados, puede parecer el mundo del revés o poco sostenible, pero nada más tienes que ponerte un programa de cocina y verás que virguerías hacen.
En un momento en el que la alimentación saludable puede ser muy sostenible, talentos culinario se pulen tras las escuelas de hostelería y restaurantes de costa yendo mucho más allá de la comida simple y de las necesidades nutricionales que deberíamos tener, esto tiene como resultado un impacto en la sociedad que va más allá de confundirnos más aún, porque una vez más alejan lo que verdaderamente es la cocina y que tan importante es, creo que primeramente deberían inculcar cocina/salud, antes que cocina/fusión.
Cocinar para controlar bien nuestra salud
La comida hecha en casa tiende siempre a ser más nutritiva que la del exterior. Una dieta saludable se puede lograr fácilmente. Cocinar en casa te da la máxima flexibilidad en la elección de los ingredientes, para seguir más de cerca las recomendaciones (los nutrientes, grasas, azúcar, etc) y tener una alimentación y una dieta equilibrada.
Las personas que participan en la compra o la preparación de los alimentos y que cocinan a menudo, tienden a respetar las recomendaciones alimentarias más que los que no lo hacen. Además, que no te guste cocinar no está vinculado a que no consumas frutas ni verduras, que hay que tener en cuenta que la falta de interés también es un factor muy importante.
Comer en familia y a hora, hace bien a la salud.
Dadas las distintas áreas geográficas del mundo, dependiendo del lugar en el que estemos, los hábitos alimenticios cambiarán de un lugar a otro, normalmente en Francia es común, por ejemplo, no saltarse el desayuno, en España no es así del todo y en Reino Unido, tampoco, se calcula que hay más obesos en Reino Unido y España que en Francia, y es que no sabemos la importancia que tiene un buen desayuno, sin saltárnoslo para nuestra salud.
Está demostrado que comer en familia, grupos de amigos y sin saltarse las cinco comidas recomendadas en un día, tiene efectos positivos para nuestra salud, dando como resultado una dieta equilibrada, y teniendo un equilibrio del sobrepeso.
Por el contrario, la investigación ha demostrado que las comidas consumidas fuera del hogar o comer a la carrera implica una dieta con una mayor ingesta de grasas y ácidos grasos saturados
La Conclusión
En momentos en que las enfermedades relacionadas con los alimentos continúan expandiéndose en Europa y medio mundo, es necesario para mejorar la salud pública. Reviviendo el arte de cocinar y dar formación a nuestros jóvenes e hijos para preparar una buena comida en su futuro, puede tener un impacto muy positivo en las elecciones de las dietas. Sería maravilloso incluir clases de cocina en los colegios en el plan de estudios e ir inculcando también en el ámbito familiar, es apto para todas las edades, para los solteros es ideal, no hay que olvidar que somos lo que comemos, nunca me cansaré de repetirlo hasta que os entre en la cabeza que cocina es igual a salud.
Espero que te haya gustado, si fue así, no te olvides de compartirlo en tus redes.
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