Las matrículas y las inscripciones para apuntarse a las actividades de los gimnasios suelen amontonarse después de la Navidad, coincidiendo con los nuevos propósitos y los atracones de comida de las semanas anteriores. A la hora de ir al gimnasio hay que tener en cuenta qué se quiere conseguir, las actividades que se ajustan más a uno mismo, y cuáles ofrecen en el gimnasio en cuestión.
Ejercicios según objetivos
Existen muchas razones por las cuales vamos al gimnasio. Entre el público adulto, la más común es bajar peso o al menos no cogerlo. Ante todo, hay que complementar ejercicio con dieta sana y equilibrada. En cuanto a la actividad física, lo mejor son los ejercicios aeróbicos como correr, hacer aerobic, nadar o montar en bici, ya que es como más rápido quemaremos la grasa.
Lo ideal es combinarlo con ejercicio anaeróbico (pesas, máquinas en el gimnasio, series de velocidad, o cualquier otro esfuerzo corto, pero intenso) para tonificar al mismo tiempo el cuerpo y que al bajar de peso, la masa muscular no se vea reducida y, con ella, la fuerza.
Para las personas que por constitución tienden a ser delgadas y a no engordar, pero que quieran coger volumen y aumentar su fuerza, el fitness es su respuesta. En cambio, para los que hacer ejercicio supone un problema por el cansancio, hay soluciones como el pilates, el taichi u otras actividades en el agua (como el aquaerobic). Aparte de que requieren hacer menos esfuerzo suelen ser muy relajantes y cómodo se puede conseguir resultados óptimos con la debida constancia.
Actividades de fitness
La fiebre que en los últimos años está llevando a todo el mundo a apuntarse al gimnasio ha influido en que cada vez haya más profesionales que se dediquen a motorizar nuestros ejercicios y a que se perfeccionen las técnicas. En la tabla de los horarios de las actividades suelen aparecer nombres que no resultan nada familiares, como el GAP, el Fit Ball o el Cardio Box.
GAP se refiere a las iniciales de glúteos, abdominales y piernas. Se trata de gimnasia de mantenimiento que trabaja concretamente esos tres grupos de músculos y que está teniendo mucho éxito en las instalaciones deportivas. Son ejercicios encaminados a combatir la acumulación de grasa en las partes del cuerpo más proclives a ello. Se está convirtiendo en una práctica muy popular, ya que permite conseguir un vientre más plano, endurecimiento de glúteos, mayor fortaleza en las piernas y mejora de la circulación.
El Fit Ball consiste en multitud de ejercicios con una bola gigante de goma como complemento. Sobre ella, apoyados o sentados sobre ella, se logran avances en equilibrio, flexibilidad, coordinación y fuerza. Es muy efectivo para problemas en la espalda y para corregir la postura. Los músculos que más se trabajan son los abdominales y los lumbares, pero con un método al alcance de todos que no requiere tanto esfuerzo como los ejercicios tradicionales sobre colchonetas.
El Cardio Box es una actividad cardiovascular que trabaja absolutamente todo el cuerpo con movimientos importados del boxeo pero que se practican al ritmo de la música, algo parecido a lo que se hace en aerobic. No se necesita ningún aparato adicional, tan solo las instrucciones de un monitor. Resulta entretenida y divertida, al mismo tiempo que tonifica casi todos los músculos principales y proporciona mejoras en flexibilidad y coordinación. En definitiva, una forma única para descargar las tensiones del día a día.
Uno de los factores determinantes para conseguir los resultados trazados es la constancia y regularidad con la que acudimos al gimnasio. La constancia sumada a una buena alimentación y hábitos saludables repercutirá, a lo largo de unas pocas semanas, en una mejora del bienestar individual.