¿ Quién no recuerda a Popeye hacer crecer sus músculos y su fuerza al comerse una deliciosa lata de espinacas? Según la creencia popular, las espinacas daban esa fuerza a Popeye por su alto contenido en hierro, que años más tarde, tras volver a analizar sus propiedades, descubrieron que fue un error de imprenta al colocar un punto decimal en el lugar equivocado. Aunque finalmente no contienen tal cantidad de hierro, si les podemos atribuir muchas otras propiedades que nos ayudarán a fortalecer nuestro organismo.
Una de las propiedades de las espinacas es su riqueza vitamínica, contiene elevadas cantidades de provitamina A, y vitaminas del grupo C y E, que tienen función antioxidante, reforzando las defensas del organismo, ayudando a una buena absorción del hierro y mejorando la visión. Muy adecuada para mujeres embarazadas, por su aporte de ácido fólico, que mejora el sistema nervioso. Es una de las verduras que más calcio poseen, opción interesante para dietas vegetarianas. No contiene casi calorías, puesto que está compuesto por un 92% de agua, ideal para dietas de adelgazamiento. Por su alto contenido en oxalatos tenemos que tener cuidado si tenemos problemas renales, ya que estos favorecen la producción de piedras en el riñón.
Por lo demás, podemos decir que las espinacas son una buena opción para deportistas, vegetarianos, embarazadas, etc, además se pueden consumir tanto crudas como cocidas, lo que nos da más variedad a la hora de prepararlas.