Esta entrada del blog es para hacerte reflexionar, para despertar tus neuronas, para tratar de poner un poco de sentido común en nuestra forma de entender la salud, principalmente porque nos meten información en la cabeza que está muy lejos de la realidad (me refiero a las compañías que se lucran a costa de nuestra salud).
Ya debes saber que la nutrición y la salud son dos de mis temas preferidos y te he comentado con anterioridad la “gran mentira” que estamos viviendo en todos los ámbitos de la vida (el dinero es el gran culpable, echa un ojo a esta ejemplo Leche ¿una gran mentira? ). En esta entrada no voy a hablar sobre el hecho de que este mundo en el que vivimos es bochornoso y que mucha gente no ve más allá de su nariz y su cuenta bancaria. Esta vez voy a explicarte, de una manera muy sencilla, por qué deberías cambiar tus hábitos alimenticios y empezar a pensar en tu cuerpo como lo que es, una máquina (dejemos las emociones y demás a un lado).
Hablemos, por ejemplo, de tu “macchina” (que significa coche en italiano y viene de lujo para este ejemplo), comparándola contigo mismo (humano, a no ser que otros animales lean mi blog). Tanto la “macchina” como tú tenéis que ser alimentados para funcionar. El hecho de que no tengas porqué estar alimentado adecuadamente para funcionar bien, no es de gran ayuda, ya que crees estar sano cuando no lo estás.
Puedes utilizar combustible para tu coche de diferentes compañías, pero como ya debes saber, la calidad de ese combustible no es la misma en todas las gasolineras. En realidad, si no recuerdo mal hay una que aparentemente vende combustible de dudosa calidad (si tienes Buenas neuronas, piensa un Poco y lo sacas). Tú obtienes el combustible (tu energía) de los supermercados, empresas de comida rápida, de tu jardín, etc. La calidad puede ser pobre, pero tú sigues funcionando aparentemente bien (sobre todo si eres joven). ¿Cuál es el problema aquí? Nunca pensamos en las consecuencias a largo plazo. Compras el combustible más barato tanto para ti y como para el coche, porque no se puede apreciar diferencia alguna en vuestro funcionamiento. Parece que “carburas” bien y también tu “macchina”.
Ahora te pido que te des una vuelta por el mecánico para que le hagan una revisión exhaustiva a tu coche, después de un tiempo “alimentándolo” con combustible de baja calidad. Estoy seguro de que van a encontrar indicios de deterioro en el coche, tal vez algo mínimo, pero algo. Lo mismo ocurrirá si vas al médico y te hacen un chequeo en profundidad: el nivel de azúcar alto, manchas en los pulmones (si fumas), lengua amarilla y pastosa … Puede que no tengas ningún síntoma, pero ¡¡¡CUERPO NO SINTOMÁTICO, NO SIGNIFICA CUERPO SANO!!! Estás hecho una basura (sin ofender), aunque no te sientas como tal (ya sea porque hayas estado así toda la vida y no puedas reconocer cómo se siente un cuerpo sano o porque tu cuerpo sea “high quality”-de alta calidad- y capaz de combatir al enemigo durante mucho tiempo).
Perdón por hablar de una manera tan poco delicada, pero muchos de nosotros no entendemos nada si no se nos habla así. Es como esas personas que entienden lo difícil que puede ser la vida cuando van a un hospital o aquellas que tienen que visitar Awschwitz (campo de concentración en Polonia) para entender la buena vida que tenemos (aunque seguimos quejándonos por todo). Ya me lo dijo un buen amigo “la persona más sabia es aquella que reconoce lo afortunada que es sin necesidad de que algo malo le ocurra para darse cuenta”.
¿Has oído alguna vez “no sé lo que me pasa, yo he estado perfectamente toda mi vida”? Te equivocas amigo mío, has tenido problemas desde hace mucho tiempo, pero los síntomas y/o signos han aparecido ahora. Sí, el dolor es siempre nuestra principal preocupación, pero debes saber que el dolor es algo bueno, es un sistema de defensa, es una alarma. Te está diciendo que algo está pasando y debes tratar de averiguar qué. Podría ser que tu cuerpo haya dicho basta porque tu alimentación estaba siendo precaria.
Por lo tanto, come adecuadamente. No comas basura que te hará enfermar, lo cual te llevará a tomar medicamentos para sentirte mejor. Sin embargo, los medicamentos sólo enmascararán tus síntomas y te aportarán alivio a corto plazo. Además, muchos de ellos harán estragos en tu salud a largo plazo (a veces a corto plazo también) . Ten en cuenta que no te estoy diciendo que haya que evitar todos los medicamentos en todas las situaciones, hay medicamentos que salvan vidas.
Recuerda: la comida debe ser tu medicina, y no la razón por la cuál tomes medicamentos. Sabiendo qué comer y cómo comerlo, puedes hacerte más saludable. Una buena alimentación puede ayudar tanto a mejorar tu salud como a prevenir su deterioro.
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Si te apetece leer esta entrada en inglés, sigue este enlace Food is medicine de mi blog inglés The Physical Therapy.
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