¿Te imaginas poder comer más para adelgazar? Sí, sí, como lo oyes. Aumentas el número de calorías que tomas al día y encima no engordas, e incluso puedes adelgazas. Pues de eso, a grandes rasgos, va la dieta inversa.
Es posible que estés pensando pero cómo se puede comer más y adelgazar. Pues para que salgas de dudas hoy voy a analizar a fondo la dieta inversa.
Lo primero que tienes que tener claro es que la dieta inversa no es una dieta para perder peso y tampoco es una dieta para ganar peso.
¿Entonces qué es la dieta inversa? Esa es la pregunta del millón.
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¿En qué consiste la dieta inversa?
Podemos decir que la dieta inversa no es ni más ni menos que el período de transición que debe haber después de estar sometidos a un déficit calórico.
Por ejemplo, si estás sometido a una dieta de definición, en la que tienes que restringir las calorías, no puedes pasar a volver a comer lo mismo que comías antes de tu dieta de definición o de lo contrario vas a tener el temido efecto yoyo.
Durante este tiempo en el que has estado adelgazando tu metabolismo ha cambiado, y al pesar menos, necesitarás menos calorías que antes de empezar tu proceso de definición.
Tenemos que volver a comer las calorías que nuestro cuerpo necesita de forma progresiva.
¿Para quién está indicada la dieta inversa?
En primer lugar, está indicada para las personas que hacen ejercicio físico. Una persona que no entrena no debe hacer este tipo de dieta.
También está indicada para las personas que han estado sometidas a un gran déficit calórico.
Y por último para las personas que tienen el metabolismo dañado. Si estás ingiriendo cada vez menos calorías y aún así no eres capaz de perder ni un gramo, este es un buen método para salir de esa tumba metabólica.
Ventajas de la dieta inversa
Este tipo de dieta tiene muchas ventajas respecto a la subida drástica de calorías. Entre las ventajas de la dieta reversa se encuentran:
La disminución de la grasa ganada, de hecho este es el principal motivo de hacer este tipo de dieta reversa.
También nos ayuda a aumentar la capacidad metabólica.
Nos ayuda a controlar el hambre después de haber hecho dieta.
Mejora nuestra relación con la comida.
No engordamos aunque estemos comiendo más cantidad de alimento.
Y si más adelante queremos volver a hacer otra dieta de definición vamos a partir de un punto inicial mucho más favorable.
¿Cómo se hace la dieta inversa?
Antes de que te pongas a hacer la dieta inversa vas a tener que calcular. Vas a tener que calcular el número de calorías que necesitas al día. Aquí yo te he enseñado a hacerlo.
Una vez que sepas las calorías que necesitas, no las vas a poder empezar a comer de repente. Como te decía antes este es un proceso de adaptación y lo vas a tener que hacer poco a poco y siguiendo unas pautas.
Pautas que tienes que seguir
Aumenta los hidratos de carbono
Lo primero que tienes que hacer es aumentar los hidratos de carbono que tomas al día.
Como ya te imaginarás estos hidratos de carbono los aumentaremos poco a poco. Aumentaremos entre el 3 y el 5 por ciento de cantidad de gramos de proteínas en una semana.
Haciendo esto se pueden dar dos casos:
Si todo ha ido bien y no hemos aumentado ni la grasa corporal ni el peso. A la semana siguiente podemos volver a aumentar otra vez esa cantidad, entre 3 y el 5%.
Pero si no ha ido bien, si hemos ganado peso o hemos ganado grasa corporal. A la semana siguiente no vamos a añadir más hidratos de carbono, vamos a seguir manteniendo este 3 o 5 por ciento inicial. Lo vamos a ir ajustando poco a poco.
Aumenta las grasas
También vas a tener que aumentar las grasas que tomas. Tampoco las puedes subir de repente.
Tienes que subir entre el 3 y el 5 por ciento cada dos semanas, y si hace falta que esperes más para subirla, espera.
Aumenta el número total de calorías
El tercer paso es aumentar las calorías totales. Se trata de que poco a poco vayamos consumiendo más calorías, así que tenemos que ir aumentándolas poco a poco.
No debemos aumentar más de un 5% de calorías a la semana.
Si aumentando un 5% tus calorías semanales notas que subes de peso vas a tener que ajustar esa cantidad e ir subiendo un porcentaje menor.
Toma suficientes proteínas
También es importante que no descuides las proteínas. Tienes que subir los hidratos carbono y las grasas, pero las proteínas siguen siendo muy importantes durante esta fase.
Tienes que tomar entre 2 y 2,5 gramos de proteína por cada kilo de peso al día.
Así que sigue prestándole atención a las proteínas.
Dale más importancia a los ejercicios de fuerza
También es importante que en esta fase priorices los ejercicios de fuerza.
Esta es una de las mejores cosas que puedes hacer para mejorar tu composición corporal y mantener un metabolismo saludable.
Estaría genial que las hagas entre tres y seis veces por semana.
Resumiendo
Ya lo sabes, si estás estancado, si has estado a dieta durante mucho tiempo y ya has conseguido tu objetivo, o si simplemente has estado comiendo poco y quieres comer un poco más sin engordar, tienes que probar la dieta inversa. Esta dieta es para ti.
Y ten en cuenta que en esta etapa es muy importante llevar un control de tu evolución. Se trata de aumentar la ingesta calórica sin engordar, así que es fundamental que vayas evaluando tu progresión por si tienes que ajustar la cantidad de calorías
Fuente: este post proviene de Operación Bikini, donde puedes consultar el contenido original.
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