4 mitos de la musculación
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En musculación más siempre es mejor
En musculación más siempre es mejor no sólo es un mito, además es muy peligroso para ti.
Este mito de la musculación está fundado en algo cierto. Para conseguir un estímulo que desencadene la mejora y el desarrollo muscular necesitamos entrenar pesado, necesitamos entrenar con intensidad. Pero eso no quiere decir que vayas al máximo de tus posibilidades, al menos no siempre tienes que ir al máximo.
Tienes que tener el estímulo óptimo. Si te pasas de frenada, si siempre vas al máximo, lo único que puedes hacer es acabar lesionándote.
Si quieres que tus músculos crezcan el principal factor para el crecimiento muscular es aplicar una tensión mecánica submáxima y sobre todo mantenida en el tiempo. Y si vas al máximo no la vas a poder mantener en el tiempo.
Tenemos que aprender que más no siempre es mejor, mejor es mejor más no es mejor.
Para ganar masa muscular tienes que llegar al fallo muscular en tus ejercicios
Este mito de la musculación está muy relacionado con el anterior.
No estoy diciendo que llegar al fallo muscular no sea efectivo para la ganancia muscular. Porque realmente es una técnica efectiva, pero no es imprescindible que lo hagas.
Si lo haces tienes que conocer no sólo las ventajas que tiene llegar al fallo muscular sino también los inconvenientes.
Es cierto que llegar al fallo muscular te puede hacer reclutar el mayor número de fibras musculares posibles y eso contribuye al desarrollo muscular. Pero también es cierto que es una práctica que puede acabar lesionándote.
El fallo muscular y el sistema nervioso.
Cuando llegas al fallo muscular estás fatigando tu sistema nervioso. Eso exige que tengas un periodo de recuperación lo suficientemente grande para que pueda volver a ser eficiente, para que se recupere, y que de nuevo vuelva a ser capaz de generar los impulsos de contracción en tu próxima sesión de entrenamiento.
Lo que pasa es que normalmente no dejamos pasar ese tiempo de recuperación necesario y volvemos a entrenar antes de que nuestro sistema nervioso se haya recuperado por completo. Si es así, cuando estés haciendo tu próxima sesión de entrenamiento te vas a notar mucho más fatigado, vas a ver que no puedes.
Y si te fuerzas demasiado, como te decía antes te puedes acabar lesionando.
El fallo muscular y la tensión muscular y de ligamentos
Además, cuando llegas al fallo muscular en tus sesiones de entrenamiento estás consiguiendo niveles de tensión en tus músculos y en tus ligamentos muy elevados. Y eso te puede acabar provocando un montón de problemas desde distensiones musculares hasta roturas en el tendón de inserción.
Así que mucho cuidadito con eso de llegar al el fallo muscular en tus entrenamientos. Lo puedes hacer de forma muy muy puntual conociendo los riesgos y siempre dejando que el cuerpo se recupere de ese sobre esfuerzo.
Fallo muscular al principio o final de la sesión de entrenamiento
El siguiente mito también está relacionado con el fallo muscular. Pero esta vez que está centrado en el momento que hay que aplicarlo, en el primer ejercicio, en el último… Ni en el primero ni en el último.
No me entra en la cabeza que haya gente que piense que se debe aplicar en el primer ejercicio. Si lo haces en el primero ya toda tu sesión la vas a hacer con fatiga muscular. Todos los ejercicios que hagas después se van a ver afectados por ese sobre esfuerzo que has hecho.
Pero si lo haces al final también te vas a encontrar con un problema. Vas a llegar al ejercicio con fatiga de los ejercicios anteriores y si llegas con fatiga no es el mejor momento para pedirle a tu sistema muscular y al neural que dé lo mejor de sí en ese momento.
Así que si a pesar de los riesgos que implica te decides a llegar al fallo muscular lo debes hacer en un solo ejercicio, solo en uno.
Por ejemplo imagínate que decides hacerlo en el press de banca, sólo tienes que hacer un ejercicio de press de banca.
Para definir hay que hacer muchas repeticiones con poco peso.
¿Cuántas veces has oído eso? No sé, yo creo que es que es el mito más extendido de todos.
La gente que quiere definir hace series de 15 o más repeticiones usando pesos muy pequeños. Creen que con eso van a conseguir ponerse definidos. Pero la realidad no es así.
Las personas que hacen esto creen que haciendo series largas de baja intensidad van a quemar más grasa y que la clave para definir en los entrenamientos no es quemar más calorías sino quemar más grasa.
La cruda realidad de la definición
Para definir no hay que bajar el peso de tus ejercicios ni tienes que aumentar el número de repeticiones.
Para definir o hacer volumen la clave está en la dieta. Si quieres ganar masa muscular vas a tener que ingerir más calorías de las que gastas y si quieres definir, si quieres perder grasa corporal, vas a tener que ingerir menos calorías de las que gastas. Pero en ningún caso tienes que bajar el peso de tus ejercicios.
Si quieres definir mi consejo es que hagas series entre 6 y 12 repeticiones y que lo hagas con un peso adecuado, que te cueste. Las tres últimas repeticiones tienen que picar, tienen que suponer te un gran esfuerzo.
Porque si hacemos una dieta muy baja en calorías y encima no le damos a nuestros músculos los estímulos que necesita vamos a acabar perdiendo músculo en lugar de grasa. Y no es eso lo que queremos bajo ningún concepto.
Tienes que elegir pesos apropiados, pesos que te supongan un estímulo, que te cueste moverlos.
Si es demasiado fácil tu músculo no va a recibir ningún estímulo por muchas repeticiones que hagas.
Por ejemplo, si coges mancuernas de un kilo cuántos ejercicios de bíceps vas a tener que hacer para que el músculo tenga el estímulo necesario.
¿A qué has oído estos mitos de la musculación más de una vez? ¿Cuál es tu opinión al respecto? ¿Me la cuentas en los comentarios?