Consecuencias negativas de entrenar en exceso
Nuestro cuerpo siempre nos avisa. Antes de llegar a un punto extremo, sentirás que tienes un cansancio y una fatiga extrema. Tu cuerpo te está indicando que estás forzando demasiado la máquina y es probable que, de seguir así, te puedas acabar lesionando.
Sin embargo, esta no es la única consecuencia negativa que tiene entrenar demasiado. Existen otras muchas:
Insomnio. Seguramente, después de un largo día y demasiado entrenamiento, te sientas muy cansado y con muchas ganas de dormir. Sin embargo, es tal la exigencia que le has pedido al cuerpo que este no consigue recuperar sus energías y concentrarlas en el descanso. Esto se debe a causa de un incremento del sistema nervioso simpático, por lo que no podrás conciliar el sueño y, por tanto, dormir.
La inestabilidad emocional y la falta de concentración son otras dos de las consecuencias que tiene realizar un sobre-entrenamiento. Esto se debe a que estás provocando a tu cuerpo un estrés excesivo. Este estrés hace que no tengas la capacidad de concentrarte en una tarea y que te sientas alterado y nervioso. Además este estrés puede provocar rotura muscular. Esta lesión se provoca a causa de la tensión mental. Cuanta más tensión mental, más tensión física. La inestabilidad emocional vendrá debido a los cambios hormonales. La falta de descanso provoca que la liberación de hormonas se produzca mayor a lo normal. Sin un control adecuado y sin dormir lo suficiente, sentirás cambios de humor y estarás más irritable.
Atento al pulso cardíaco. Llevar tu cuerpo al límite, aun cuando el cuerpo se encuentre en reposo, puede hacer que se produzcan taquicardias o alteración del pulso. Cuando no descansas, el cuerpo no consigue recuperarse. Esto hace que el cerebro y el corazón necesiten más oxígeno y hacer un mayor esfuerzo para que el cuerpo siga funcionando. Es decir, que estarás obligando a tu corazón a funcionar más y, por tanto, poniendo en riesgo tu salud.
Falta de apetito. Como tu cuerpo no está bien, no tendrás hambre. Este es uno de los primeros síntomas que sentirás, junto al cansancio. Es más, es bastante probable que experimentes náuseas y malestar estomacal.
Sudoración excesiva. Tu sistema nervioso simpático habrá aumentado por lo que sentirás un exceso de sudoración. Las lesiones, lógicamente, también se incluyen en el pack. Seguramente, si entrenas más allá de tus posibilidades, descubras que tu cuerpo no se encuentra bien y te acabes lesionando. También es bastante común que caigas enfermo con mayor facilidad, debido principalmente a la disminución de las defensas del cuerpo.