La actividad física siempre es un ejercicio saludable y altamente recomendable, pero no todas las personas están preparadas para adaptarse a la exigencia de la misma. La existencia de molestias o dolores que puedan tender a la cronicidad exigen una documentación previa en relación a las consecuencias de practicar un determinado deporte. En el caso concreto del dolor de espalda esta molestia puede imposibilitar la práctica de un abanico muy amplio de actividades; si es tu caso, te recomendamos estas tres disciplinas para mitigar sus efectos:
1. La natación
2. El yoga
3. El pilates
Natación para Evitar Dolor de Espalda
NATACIÓN contra el dolor de espalda
La natación es un ejercicio que siempre ha contado con el beneplácito casi unánime de toda la comunidad médica. Se trata de una actividad que, gracias a su reducido impacto sobre el cuerpo, ayuda mucho a las personas que presentan molestias o dolencias. Además, ejercitan muchas partes del cuerpo.
En el caso concreto de la espalda la ayuda del agua merma el impacto directo de la rotación, reduciendo y mitigando el dolor muscular. La natación es altamente accesible, no tiene edad ni sexo y casi siempre encontraremos un gimnasio cercano con una piscina cubierta.
Muchas son las rutinas existentes en relación al estilo y la duración de la actividad, el personal del gimnasio te ayudará a establecer una que se adapte perfectamente a tus necesidades y capacidades. Con el paso del tiempo la mejora será notable y tu cuerpo aumentará masa muscular y se tonificará.
YOGA y salud para tu espalda
El segundo ejercicio recomendable es el yoga. Se trata de una actividad física basada en los estiramientos del cuerpo. Esta disciplina aporta un gran número de beneficios a todas las personas que deciden aventurarse en su exótico universo.
Gracias a las posturas que se aplican y ejecutan, el cuerpo mejora la flexibilidad, la resistencia y la fuerza. Se trata de un ejercicio que ayudará a mitigar el dolor de espalda, aportando relajación muscular. En total, existen ocho ramas diferentes relativas al yoga, pero todas ellas buscan aumentar la resistencia y la fortaleza de una parte localizada de nuestro organismo.
Se busca la integración del cuerpo y alma en una actividad que cada vez gana más adeptos. Muchas son las personalidades públicas que se han definido públicamente como amantes del yoga, como es el caso de Sara Carbonero, Irina Shayk, Miranda Kerr o la jugadora de póquer Adrienne Rowsome.
PILATES, evita el dolor de espalda
La tercera y última actividad física que puede ayudar a disminuir el dolor de espalda es el pilates. Este ejercicio nació a principios del siglo XX, y se basa en la fusión de diferentes especialidades y técnicas. como es el caso del yoga, la gimnasia o los estiramientos.
Buena parte de los ejercicios se realizan mediante movimientos suaves y controlados, con un impacto sobre el cuerpo muy bajo. Lo que se busca es mejorar la fuerza muscular sin aumentar el volumen utilizando también como herramienta clave nuestra propia respiración.
La mayoría de ejercicios toman como eje piramidal la zona del abdomen, este hecho provoca que la columna vertebral y la sección lumbar gane fortaleza y se tonifique. Esta situación ayuda a disminuir el dolor de espalda y de rebote mejora nuestra columna vertebral. El pilates también mejora la alineación postural y corrige posibles alteraciones, estilizando nuestro cuerpo y provocando un aumento de la autoestima.
Gracias a los ejercicios basados en la respiración también se ayuda a eliminar el estrés, elemento tan presente en nuestro día a día. También incentiva la relajación del cuerpo y elimina posibles alteraciones musculares.
Este es el trío de ejercicios que destacamos si existe el deseo de olvidarse del dolor de espalda. Los tres son accesibles y abiertos al gran público. Sólo falta voluntad y sacrificio, si uno se adentra en el universo de la actividad física verá cómo el cuerpo lo agradece.