Incluir frutas y verduras en la dieta es algo saludable e indispensable para gozar de buena salud. Por ello, es claro que este tipo de alimentos tienen muchas propiedades que benefician nuestro organismo, mejoran nuestras defensas y nos previenen de muchas enfermedades. Sin embargo, antes de llevarlos a casa, ambos alimentos son susceptibles de contaminarse con muchos patógenos que afectan nuestra salud, no sólo por el hecho de estar expuestos directamente a los agentes de nuestro entorno, sino que también en el proceso de siembra y cultivo, donde son sometidos a fumigaciones con pesticidas altamente contaminantes.
Por lo general las frutas y verduras se consumen crudas y esto implica un mayor riesgo para la salud, es por eso que resulta muy importante aprender a lavar y desinfectar muy bien este tipo de alimentos, con el fin de disminuir notablemente el riesgo de sus diferentes contaminantes, que pueden estar presentes por la suciedad, el proceso de almacenaje, el transporte y, como decíamos anteriormente, el uso de químicos y pesticidas con los que son cultivados.
En primer lugar debes tener en cuenta que lo mejor que puedes hacer para lavar tus frutas y verduras, es hacerlo antes de partirlas o pelarlas. Cuando lavas la fruta o verdura entera, evitas que los patógenos que hay sobre la corteza, se trasladen hasta el interior del alimento. Esto lo puedes hacer independientemente de que la vayas a consumir o no, con cáscara.
También debes asear muy bien tus manos antes de manipular cualquier tipo de verduras y frutas. La higiene personal también jugará un papel muy importante en la no contaminación de este tipo de alimentos.
Al seleccionar las frutas y verduras que vas a lavar, las debes poner al menos dos minutos bajo el grifo, o bien, puedes ponerlas en un recipiente con agua para ahorrar agua. Si tienen muchos excesos de suciedad, puedes ayudarte utilizando un cepillo o esponja limpia y libre de jabones.
Es recomendado eliminar las hojas externas de algunas frutas y verduras, ya que pueden estar contaminados.
Para desinfectar las frutas y verduras, hay varios trucos caseros que puedes tener en cuenta, ya que utilizan productos antibacteriales, capaces de combatir las bacterias en estos productos y disminuyendo el riesgo que tienen sus patógenos contaminantes.
Después de seguir estos pasos, es importante también limpiar muy bien los utensilios de cocina a utilizar, para evitar que el alimento se contamine mientras se manipula en la cocina.
Cuando ya hayas lavado tus frutas y verduras, y preferiblemente antes de cortarlas, lo ideal es desinfectarlas completamente, con algunos tips caseros muy efectivos.
Bicarbonato de soda
Este producto es muy económico, fácil de encontrar y, por lo general, lo incluimos en la canasta familiar, ya sea con fines culinarios o para uno que otro problema de salud. Otra de sus virtudes es limpiar y desinfectar efectivamente, es por eso que lo podemos utilizar para darle una correcta limpieza a las frutas y verduras.
¿Cómo hacerlo?
Diluir una cucharada sopera de bicarbonato de sodio en un litro de agua, poner las verduras y/o frutas en remojo por 10 minutos y listo.
Vinagre
El vinagre es otro de los desinfectantes naturales más poderosos que podemos encontrar, pues elimina todo tipo de bacterias al ser antimicrobiano. Al igual que el bicarbonato, es un producto muy económico y que encontramos en la canasta familiar. Lo mejor de todo es que es bueno para la salud y no tiene componentes tóxicos.
¿Cómo hacerlo?
Diluir un vaso de vinagre en un litro de agua, posteriormente remojar las frutas durante 10 minutos u optar por rociar la mezcla con un spray antes de usar el alimento en las preparaciones de la cocina.
Limón
El limón es un alimento conocido por sus propiedades desinfectantes y antibacteriales, que se deben principalmente al ácido cítrico. Este alimento combinado con un poco de vinagre, hace un desinfectante natural, ideal para eliminar cualquier patógeno de tus frutas y verduras.
¿Cómo hacerlo?
En un recipiente mezcla muy bien partes iguales de agua, limón y vinagre. Posteriormente coloca a remojar las frutas y/o verduras a utilizar, dejando actuar por 10 minutos, para luego enjuagar, secar con una toalla limpia y posteriormente utilizar.