Hoy hablaremos del miedo, sentimiento que experimentamos cuando nuestro cerebro considera estamos en peligro, no es necesario encontrarnos en dicha situación en ese momento, con solo pensar lo que pasaría, podemos experimentar este sentimiento. Es aquí donde se logran diferenciar los tipos de miedos en dos partes, bueno y malo. En el presente post expondré las diferentes características dicotómicas de los tipos de miedo, sin embargo, pondré mayor énfasis en el miedo malo que es el cual debemos vencer para lograr el desarrollo personal.
Miedo bueno.
Para hacer más dinámica la explicación y no entrar en rodeos, utilizaré un ejemplo clásico. Imaginemos que estamos perdidos en un bosque, no tenemos comida y debemos llegar a cualquier lugar seguro antes que anochezca. Nos vemos atrapados en un dilema y tenemos que tomar una decisión rápida. Observamos dos caminos, uno corto y uno largo, en el primero podemos ver un tigre al acecho, el segundo está totalmente despejado. Pero el margen de recorrido entre ambas opciones es grande. ¿Qué debemos hacer? Pensemos unos segundos… En esta situación no puedo aconsejarte ir por el camino corto, ya que es tu vida la que está en riesgo inminente. Sin embargo, la otra alternativa es también peligrosa por las pocas probabilidades de llegar antes que anochezca, pero no es inminente. Por lo tanto, ambas ponen en riesgo nuestra vida, pero, gracias al miedo, lo más probable es que escoja ir por el camino menos riesgoso, el largo. Este es un claro ejemplo del miedo bueno, de como este nos protege y otorga un juicio crítico antes de tomar decisiones peligrosas.
Miedo malo.
Después de ver el ejemplo anterior podemos pensar ¿en qué momento tener miedo es malo? Pues, queridos lectores, como leí alguna vez en internet, “el miedo es una muralla que divide lo que eres de lo que puedes llegar a ser.” ¿Cuántas oportunidades desaprovechamos por miedo? Para experimentar este sentimiento existen diversas situaciones que, por donde lo analicemos, siempre tienen un resultado positivo si vencemos nuestro terror al fracaso o al qué dirán. A continuación explicaré por qué está mal sentir miedo y todo lo que podemos ganar al vencerlo.
Miedo al fracaso o al qué dirán.
Todos tenemos miedo a equivocarnos, nadie es perfecto y por más preparados que estemos existen posibilidades que esto ocurra. Entonces, ¿por qué no intentar algo por miedo al fracaso? Si nunca nadie tiene total seguridad de triunfar, no tiene sentido no intentarlo a menos que las probabilidades de fallar sean totalmente abrumadoras, en este caso nos deberíamos preparar mejor para aumentar nuestras posibilidades. Pero ¿si fallamos? Para empezar te aseguro que, por lo menos, tendremos una segunda oportunidad, lo que podemos hacer después de fracasar es pensar ¿qué hice mal? y ¿qué puedo hacer mejor? Luego, con cada vez más posibilidades de triunfar, volver a intentarlo habiendo corregido nuestros errores. Además, mejor es la persona que lo intenta que quien solo está sentado criticando, con esto me refiero a que no debe importarte el qué dirán porque mientras ellos están observando tus movimientos, tu estás asumiendo riesgos, tomando oportunidades y aprendiendo cada día mas.
Por otro lado, existen situaciones que son ahora o nunca, “a veces no hay una próxima vez, a veces no hay segundas oportunidades, a veces es ahora o nunca”. En este tipo de casos, el mejor consejo que te puedo dar es inténtalo, ¿qué podrías perder? A veces nada ¿Qué puedes ganar? Siempre experiencia. Cree en tí e inténtalo, recuerda siempre que la vida se vuelve más interesante si somos atrevidos.
Luego de vencer el miedo.
Como cité antes, el miedo es una muralla que debemos sobrepasar. Vencer el miedo significa dar un paso como persona, además de obtener experiencia al hacerlo, abre puertas a nuevas oportunidades y a obtener una vida diferente, menos monótona. Por otro lado, nos brinda una satisfacción interna de autorrealización, además, sabremos que lo intentamos y no viviremos pensando en que pudo haber pasado si lo hubiéramos hecho.
Para explicar mejor lo conveniente que es vencer nuestros miedos, fracaso o el qué dirán, les contaré lo que me pasó al hacerlo, para ser más específico sentía miedo a qué dirá ella. Hace poco más de un mes, fuí al parque a pasear a mi perra, un día como cualquiera, hasta que se cruzó una chica hermosa ¡realmente hermosa! Estaba con sus tres perros, me habló y respondí cortante ¡qué idiota! Esto paso por miedo a dar una mala respuesta y arruinar todo, quise ir a lo seguro y pensar mucho mis palabras. Pero, pensé tanto que se fue ¡no me lo pude perdonar toda esa noche! Sin embargo, sabía que en algún momento nos volveríamos a cruzar y no podía perder esa segunda oportunidad, llegué a mi casa y leí un verso que, gracias a esta experiencia, quedará grabado para siempre en mi memoria “La vida es más interesante si eres atrevido” decidí serlo y, por estas razones de la vida creo tener suerte, pues, al día siguiente fui y volví a encontrarla, obviamente le hablé y ,hoy en día, tengo el honor de poder decir que salgo con esta chica y me confesó que, la primera vez que nos vimos, estaba esperando que siga la conversación. Este post va dedicado a ella.
Como síntesis podemos afirmar que si existen dos tipos de miedos, uno al que hay que obedecer en ciertas circunstancias y otro al que debemos vencer. Si en estos momentos estás pensando sobre si asumir un riesgo o no y tienes miedo de fracasar o al qué dirán, no te preocupes, ¡vamos, inténtalo! ¿Sabías que más del 90% de los blogs acaban abandonados antes de su primer año de existencia? Yo siempre lo supe y eso no me desanimó a empezar con este proyecto, para ser sincero he pensado en rendirme, sin embargo no me lo puedo permitir. Tengo miedo de llegar al año y no obtener mejores resultados y pensar que he aprovechado mal mi tiempo ya que tengo otras responsabilidades e intento acomodarme para poder escribir un blog semanal. Pero hago el esfuerzo e intento mejorar cada día, además me siento bien al escribir para ustedes, gracias de verdad. Si yo puedo tu también, ¡inténtalo!
Cuéntame lo mejor que te ha pasado al vencer tus miedos, deja tu comentario.
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¡Hasta el próximo post!